El recinto ferial siempre ha sido el punto de encuentro ‘natural’ de la feria de San Lucas y en un año de ‘fiestas’, el esfuerzo por acondicionarlo para permitir su disfrute de forma segura y controlada está funcionando. Todos los accesos tradicionales están vigilados por personal que controla por ‘conteo’ el acceso a un recinto con aforo permitido para 17.000 personas (3.600 en la zona de casetas).
Recuerdan el uso obligatorio de mascarilla y supervisan que nadie acceda con bebida o comida. También que no se celebre botellón.
Sin portada en la entrada principal, a la altura de la primera rotonda de la Avenida de Granada, el acceso que baja a la explanada está iluminado como siempre.
Sin embargo, la segunda portada se ha mantenido, convirtiéndose ésta en la zona de acceso principal al recinto ferial, por la cercanía de la parada del autobús y por la proximidad de la zona de casetas. De hecho, esta entrada al recinto ferial está dividida por unas vallas que diferencia la zona de las cuatro casetas habilitadas este año, siendo la de mayor tamaño la del colectivo de Bomberos. También han montado ‘La Fábrica del arte’, ‘La Botellita’ y ‘Santa Ana’, ésta última, la única de comida en el recinto acotado. Sus tradicionales paellas, papas a lo pobre y carnes a la brasa invitan a disfrutar de un almuerzo o cena como siempre.
El resto del recinto ferial suma otros negocios de restauración, con aforo controlado y mesas con distancia de seguridad. Los puestos de turrones, vinos, comida rápida y las tómbolas están repartidas por el recinto ferial, con mayor espacio para el esparcimiento. Las atracciones son idénticas a las de las ediciones pasadas. El parque ‘Jaén Auténtica’ está animando la afluencia de todo tipo de personas, en distintas franjas horarias.
La única diferencia en la zona de los cacharritos son los carteles que recuerdan las normas de uso para evitar contagios de Covid-19 y los dispensadores de gel hidroalcohólico, presente en todos los puestos.
El próximo día 13, el parque de atracciones celebrará el 'Día sin ruido', desde las 18 a las 21 horas. Esta medida persigue facilitar el acceso al recinto ferial a los ciudadanos que son sensibles a la contaminación acústica, beneficiar a aquellas personas a las que les afectan los ruidos fuertes o que padecen algunos problemas sensoriales como el Trastorno del Espectro Autista (TEA) y Asperger.
Por otra parte, el paseo central está lleno de pórticos de iluminación idénticos al de la entrada principal. También se han habilitado en esta zona, la de mayor frecuentación y flujo de personas, pequeñas papeleras para evitar la acumulación de suciedad.
Los equipos de limpieza de la concesionaria municipal FCC procedieron, a primera hora de este domingo, a dejar el recinto ferial en “perfectas condiciones” después del primer día de las Fiestas de San Lucas. Está funcionando un despliegue especial con la puesta en marcha de dos equipos de apoyo, dotados de camiones de recolección trasera y caja abierta, barredora de arrastre, aspiración y limpieza de acerado con hidropresión. Además, hasta el 18 de octubre hay un tercer equipo en servicio en el recinto. Junto a estos operarios, tienen presencia en el ferial la Policía Local, en coordinación con el resto de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, para garantizar que todas las jornadas de fiesta transcurran de forma adecuada.