Enmarcados en la recesión económica, el primer presupuesto de José Antonio Griñán como presidente andaluz prevé una reducción del empleo de 50.000 puestos de trabajo medidos por la EPA y una previsión de crecimiento para el próximo ejercicio que mantendrá los valores negativos (-0,3%), aunque según el Gobierno andaluz la economía andaluza "mejorará".
Por ello, la consejera de Economía y Hacienda, Carmen Martínez Aguayo, señaló que el Presupuesto es "prudente y austero", y, en términos generales, cree que mantiene el impulso a la actividad económica para salir de la crisis, da prioridad a las políticas educativas, asume un decidido compromiso con las políticas sociales y la igualdad de oportunidades e incide en la creación de empleo y la formación.
Una visión muy distinta a la de la oposición (PP e IU), que rechaza las "engañosas y cobardes" cuentas del 2010 y está convencida de que no servirán para combatir el alto índice de desempleo ni para salir de la crisis económica.
El presupuesto para 2010 cuenta con una importante disminución de los ingresos tributarios (-21%), tanto por la caída de las entregas a cuenta procedentes del Estado como por la menor recaudación derivada de los tributos de gestión propia.
Para compensar la reducción, los ingresos por operaciones financieras se incrementarán un 78,8%.
De este modo, la Junta seguirá utilizando el tope de déficit público que permite la Ley de Estabilidad y recurre a la deuda pública para financiarlo.
De la cantidad total presupuestada, 28.267,6 millones corresponden a ingresos no financieros, que experimentan un descenso del 7,9%, en buena medida debido a la importante caída tributaria.
En la ley presupuestaria se hace una apuesta por colaboración público-privada para financiar inversiones en infraestructuras y sectores estratégicos tras caer la inversión de la Junta un 6,8 por ciento hasta los 7.112 millones.
Entre otras medidas, se limita la creación de nuevas plazas de servicios generales de la administración, se congelan las retribuciones de los altos cargos y se ponen topes a las de los directivos de las empresas públicas, pero no a los elegidos por el Parlamento o a los que desarrollen su actividad en condiciones de mercado, lo que ahorrará 134,4 millones.
Deuda histórica
En medio de la agria polémica por la liquidación en solares de parte de la Disposición Adicional Segunda del Estatuto (deuda histórica), las cuentas andaluzas consignan una partida de 484 millones a cuenta de este concepto que se destinan a inversiones en políticas de educación, sanidad, servicios y prestaciones sociales, vivienda y urbanismo, y a políticas de infraestructuras actuaciones hidráulicas.
Las diferencias mostradas entre los modelos económicos del PSOE y de la oposición quedaron incluso patentes a la hora de contabilizar la enmiendas pactadas, del total de casi 2.000 que presentaron populares e izquierdistas.
El PSOE, que las provincializa, las eleva a 92 mientras la oposición las cuantifica en 53 (32 del PP y 21 de IU), que movilizarán unos 21 millones de euros.
El PP e IU coincidieron en destacar con matices el "fracaso" del modelo económico de la Junta y auguran más paro y una salida más tardía de la crisis, y recriminaron al Gobierno andaluz "entreguismo y sumisión" al Gobierno de Rodríguez Zapatero respecto a la deuda histórica o los "perjuicios" del sistema de financiación.
Los socialistas aludieron a la "demagogia barata", especialmente del PP, defendiendo la austeridad y recorte del gasto corriente de las cuentas, su "apuesta" por la educación y las políticas sociales.
Además, destacaron su "voluntad" de consenso y reprocharon a la oposición la "inviabilidad" de muchas de sus enmiendas.
Los villancicos anuncian la Navidad y las vacaciones
Tras el debate presupuestario, los diputados andaluces despidieron el periodo de sesiones y saludaron un año más la llegada de la Navidad al ritmo de villancicos.
Después de que la presidenta del Parlamento, Fuensanta Coves, pronunciase un pequeño discurso para despedir el curso político y agradecer a todos los diputados su trabajo y desearles Feliz Navidad, un grupo de diputados, acompañados de trabajadores y funcionarios de la Cámara autonómica, entonaron varios villancicos en el Salón de Plenos. Otros parlamentarios no dudaron en sumarse a los componentes del coro, que entonaron los villancicos acompañados por guitarras y panderetas.
Como componentes del coro parlamentario figuraban la consejera de Salud, María Jesús Montero; el consejero de Empleo, Antonio Fernández; la consejera de Agricultura y Pesca, Clara Aguilera; el secretario general del PP-A, Antonio Sanz; la diputada del PP-A Carolina González Vigo; el diputado del PSOE-A Miguel Ángel Vázquez; o el diputado de IULV-CA Ignacio García.
El resto de los diputados de la Cámara autonómica participaron en la actuación aplaudiendo y haciendo coros. Así, entre los participantes se situaron el presidente de la Junta, José Antonio Griñán, y varios miembros del Gobierno andaluz, entre los que destacaban el consejero de la Presidencia, Antonio Ávila; la consejera de Economía y Hacienda, Carmen Martínez Aguayo; la consejera de Obras Públicas y Transportes, Rosa Aguilar; o la consejera de Educación, Mar Moreno. Por su parte, el presidente del PP-A, Javier Arenas, tampoco perdió la oportunidad de unirse al coro.
El Parlamento andaluz recuperó, a continuación, su habitual 'seriedad' para la constitución de la Diputación Permanente, órganos encargado de velar por los poderes de la Cámara en periodo de vacaciones parlamentarias. La institución volverá a la actividad en el mes de febrero del próximo año, ya que enero es inhábil.
