Bruselas acoge la primera ronda negociadora sobre Gibraltar de 2022

La primera ronda negociadora de 2022 entre la Unión Europea (UE) y el Reino Unido sobre la situación en la que quedará Gibraltar tras el Brexit comenzó este martes y continuará hasta el miércoles, según indicaron a Efe fuentes comunitarias.

Las conversaciones se desarrollarán en un formato híbrido, con parte del diálogo a través de videoconferencias y otra parte en Bruselas, donde se encuentra la sede de la Comisión Europea, encargada de la negociación por parte del club comunitario.

Las fuentes confirmaron que se trata de la primera ronda de negociaciones sobre el Peñón en 2022 y afirmaron que cubrirá “todas las cuestiones que se incluirán en el futuro acuerdo entre la UE y el Reino Unido”.

Añadieron que por el momento no está previsto un encuentro político en esta nueva ronda entre los jefes negociadores, el vicepresidente de la CE para Relaciones Interinstitucionales, Maros Sefcovic, y la ministra británica de Exteriores, Liz Truss, quien ayer anunció su contagio de coronavirus y precisó que seguirá trabajando desde su casa.

El secretario de Estado español para la Unión Europea, Pascual Ignacio Navarro Ríos, destacó el martes de la semana pasada el "espíritu constructivo" en el que se están desarrollando las negociaciones sobre Gibraltar y dijo esperar que avancen "lo suficiente" en las dos rondas negociadoras previstas estas semanas.

También la semana pasada, el ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, mantuvo un encuentro en Bruselas con Sefcovic para hablar sobre los avances en el acuerdo sobre Gibraltar.

"Contento de haberme reunido con el ministro español de Exteriores, José Manuel Albares, para hablar sobre las relaciones entre la Unión Europea y el Reino Unido y, en particular, las negociaciones en curso sobre Gibraltar. Nuestros equipos europeo y español trabajan mano a mano para avanzar en las conversaciones", compartió Sefcovic en Twitter el 24 de enero.

La futura relación entre la UE y el Peñón no está incluida en el acuerdo comercial que Londres y Bruselas alcanzaron en la Nochebuena de 2020, por lo que se necesita un convenio separado que la Comisión Europea y el Gobierno británico están negociando.