La Justicia alemana dio curso a la acusación formal presentada por la Físcalía portuguesa contra Christian Brueckner, de 45 años y sospechoso de la desaparición y secuestro en 2007 en el Algarve de la niña británica Madeleine McCann, "Maddie".
Brueckner, quien cumple condena en Alemania por delitos de drogas y tiene una investigación abierta por la violación de una estadounidense de 72 años, fue informado por sus abogados de la acusación de la Fiscalía de Faro y tramitada a través de la alemana de Braunsweig (norte de Alemania), informa el semanario "Der Spiegel".
La Fiscalía de Faro había cursado la acusación a través de sus colegas alemanes, en aplicación de una petición de cooperación judicial internacional emitida por el ministerio Público de Portugal.
El Departamento de Investigación y Acción Criminal de Faro (DIAP) y la Policía Judicial, en cooperación con las autoridades inglesas y alemanas, investiga desde hace años a Brueckner por la desaparición de Madeleine McCann cuando estaba de vacaciones con sus padres en el Algarve. Sin embargo, en Alemania no se había presentado hasta ahora una acusación formal contra él
"Maddie" desapareció el 3 de mayo de 2007, pocos días antes de cumplir los cuatro años, del apartamento que había alquilado la familia para pasar sus vacaciones. Sus padres habían salido a cenar a un restaurante cercano con unos amigos y dejaron a la niña con sus dos hermanos en la casa.
Pese a la intensa búsqueda de las autoridades portuguesas y a las múltiples iniciativas lanzadas por los McCann ante todo tipo de instancias, políticas o incluso ante el Vaticano, no se logró dar con la pista de la niña. Los propios padres tuvieron que afrontar sospechas de ser los responsables de la desaparición de Maddie.
En junio de 2020, el caso dio un giro inesperado, al presentar cargos contra el sospechoso la fiscalía de Braunschweig. Fue a raíz de un cruce de datos entre una serie de delitos sexuales contra Brueckner, quien entre 1995 y 2007 vivió temporalmente en el Algarve y, según se comprobó en su teléfono móvil, había estado cerca del complejo vacacional de los McCann cuando desapareció la niña.
Las sospechas de que Brueckner podía estar implicado en la desaparición de Maddie tomaron peso tras ser extraditado desde Portugal a Alemania en 2017 acusado de un caso de abuso sexual a menores en Grecia.
Tras cumplir la mitad de su condena abandonó su país, pero volvió a ser extraditado, esta vez desde Italia, por otro caso relacionado con las drogas. Se le acusó de la violación de la mujer de 72 años en Praia da Luz (Portugal) y además se le investiga por otra presunta violación de una mujer irlandesa en 2004 en Portugal.
El sospechoso tiene abundantes antecedentes penales por abusos sexuales, agresiones físicas, así como robos y delitos menores, en algunos casos relacionados con su estancia en Portugal. Vivía de trabajos ocasionales y también de delitos contra la propiedad en hoteles y apartamentos.