Los responsables de Defensa de Estados Unidos, Robert Gates, y de Francia, Hervé Morin, coincidieron en que el anuncio hecho el domingo por Irán de que va a enriquecer uranio echa por la borda todas las ofertas de diálogo que le habían hecho la comunidad internacional.
“Irán lo ha rechazado todo”, lamentó Gates en una comparecencia conjunta ante la prensa con Morin, que puso el acento en la “total convergencia” de posiciones sobre el análisis de la situación y los pasos que hay que dar.
“Toda la comunidad internacional ha intentado establecer condiciones de diálogo durante meses” con el régimen iraní pero “no se ha conseguido nada”, explicó el titular francés de Defensa, que dijo tener “la certidumbre y la convicción” de que los programas nucleares iraníes “tienen un objetivo militar”.
Por eso consideró que “desgraciadamente, será necesario un diálogo internacional que conducirá a nuevas sanciones” ya que no hay alternativa a “trabajar en nuevas medidas” contra Irán en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. “Tenemos que encontrar una forma pacífica de resolver esta cuestión”, par lo que es necesario que toda la comunidad internacional presione unida a Teherán, señaló Gates.
Gates, que se reunió ayer con el presidente francés, Nicolas Sarkozy, y con el ministro de Exteriores galo, Bernard Kouchner, puso el acento en que “la comunidad internacional ha ofrecido múltiples oportunidades a Irán” para demostrar que el uranio enriquecido lo quería para su reactor de investigación, y no para dotarse del potencial para fabricar armas atómicas.
Una vez constatada que esa línea se ha agotado, el responsable estadounidense recordó que el “grupo de los seis” (los cinco miembros del Consejo de Seguridad de la ONU más Alemania) ya había establecido que “el próximo paso es la acción de presión de la comunidad internacional”.
A ese respecto, Kouchner mostró dudas sobre la posibilidad de que se pueda votar una resolución en el Consejo de Seguridad durante su presidencia este mes, en particular por las reticencias de China.
“Hay una lista de sanciones estadounidense, una lista de sanciones europeas: hay que comparar la eficacia”, dijo Kouchner.