Carlos Aránguez, abogado de Juana Rivas, ha defendido este lunes -cuando se ha publicado que un Juzgado de Granada ha admitido a trámite la querella que el juez Manuel Piñar presentó contra él por supuestas calumnias al acusarlo de ser parcial- su libertad de expresión y el derecho de defensa.
"Me ampara la libertad de expresión e información y el derecho a la defensa, y por supuesto también ganaré ese procedimiento", ha señalado el letrado de la vecina de Maracena (Granada), que fue condenada precisamente por Piñar por la sustracción de sus dos hijos menores.
Según Aránguez, el juez que se ha querellado contra él tendrá ahora que dar explicaciones como testigo en un juzgado, con la consiguiente obligación de decir la verdad, sobre cuestiones que -a su juicio- todavía no han sido investigadas por la justicia.
En este sentido, a través de un comunicado remitido a los medios, se ha vuelto a referir a las publicaciones del magistrado en la red social Facebook o las supuestas relaciones de su entorno familiar con Juana Rivas y su expareja, el italiano Francesco Arcuri.
Esta comunicación del abogado se produce después de que el diario Ideal haya avanzado este lunes que el Juzgado de Instrucción 5 de Granada ha admitido a trámite la querella del juez Piñar contra Aránguez por un posible delito de calumnias o injurias, al haber calificado la conducta del magistrado como parcial.
La decisión judicial se conoce además días después de que unos 70 letrados pidieran al Colegio de Abogados de Granada que dejara "sin efecto" la sanción de 45 días de suspensión impuesta a Aránguez, y expresaran su "total disconformidad" con la actuación sancionadora de dicho órgano al entender que suponía un "menoscabo inaceptable del derecho de defensa y de la libertad de expresión".