El cabildo general de la Hermandad de la Piedad respaldó este miércoles por amplia mayoría la posibilidad de procesionar en la tarde del Sábado Santo, abandonando de este modo la jornada del viernes, en la que tradicionalmente ha venido haciéndolo desde 1639 salvo el periodo comprendido entre 1957 y 1983.
En concreto, en la sesión se contabilizaron 79 votos afirmativos frente a cuatro contrarios a la idea de abandonar el Viernes Santo.
De este modo, se da ya por hecho la recuperación del Sábado Santo como jornada procesional para la Semana Santa de 2023, toda vez que el proyecto que estaba abanderando el Consejo local de la Unión de Hermandades dependía en buena medida de la decisión del cabildo de la Hermandad de la Piedad.
Ese proyecto tenía como principal interesada a la Hermandad de la Mortaja, que desde su fundación abogó por procesionar en la jornada del Sábado Santo y que hasta ahora ha venido haciéndolo en la víspera del Domingo de Ramos.
De hecho, esta cofradía había renunciado expresamente a la posibilidad de hacer estación de penitencia en la Santa Iglesia Catedral hasta que no pudiera hacerlo el Sábado Santo.
Estos últimos meses, el Consejo había invitado sin éxito a otras cofradías a sumarse a este proyecto.
Sin embargo, hace apenas unas semanas se encontró con la disponibilidad de la Hermandad Sacramental de Santiago de procesionar en esta jornada con el Cristo de las Almas, una imagen que no sale a la calle en Semana Santa al no estar integrada esta corporación en la nómina de las que hacen estación de penitencia a la Catedral.
Por tanto, el Sábado Santo de 2023 estará integrado por el Cristo de las Almas, La Sagrada Mortaja y La Piedad.
El Viernes Santo se queda únicamente con cuatro cofradías. Esta circunstancia abre la puerta al traslado de otras corporaciones de reciente llegada a la Carrera Oficial, descargando así jornadas que están saturadas.