Asturiano por la rama materna, a José Antonio Agarrado le viene la afición por la buena mesa también por la familia papá, el inolvidable doctor Agarrado, uno de los cirujanos plásticos más prestigiosos de su tiempo.
Para no equivocarnos, le hemos citado para sentarnos a mesa y mantel en un restaurante de Valdelagrana donde despachan fabada, pote y cachopo como si no hubiera un mañana. Lo curioso es que el ritmo en La Terracina no decae ni siquiera en verano.
Precisamente el doctor Agarrado recuerda los veranos con sus tres hermanos en Asturias y cómo su padre se volvía hasta Jerez con el coche lleno de queso de Cabrales en el mes de agosto.
Una más, y les invito a que se recreen con nosotros con la buena cocina de La Teresina en el vídeo adjunto. Cuando servidor decidió dedicarse al periodismo gastronómico, el doctor Agarrado, que además de amigo es mi dietista, reconoce que "lo pasé mal, porque sé que eres bien aficionado y que te ibas a meter en la boca del lobo".
En fin, nada que no pudiera solucionar la dieta disociada que tanto éxito tiene.