Asaja Almería ha indicado este martes que la provincia almeriense tiene la tasa de jóvenes agricultores y ganaderos más alta de España, de forma que el 8,7 % de los productores tiene menos de 35 años, y son las comarcas agrarias del Campo de Nijar con un 11,3 % y el Campo de Dalias con un 12,3 % las que registran un relevo generacional más alto.
Según ha expuesto en una nota la organización agraria, en este contexto y en comparación con Andalucía (4,4 %), y el conjunto del territorio España (3,9 %), Almería duplica a la tasa nacional y casi lo hace con relación a la tasa andaluza, de acuerdo a los datos proporcionados por el último Censo Agrario publicado por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
"La agricultura en invernadero demuestra una vez más que es el motor del relevo generacional en Almería, por lo que tenemos la obligación y el compromiso de que siga siendo atractiva", señala la presidenta de Asaja Almería, Adoración Blanque.
La organización subraya que, en este momento, la provincia esta "pendiente" de una nueva resolución definitiva de la ayuda a la incorporación de jóvenes a la actividad agraria, enmarcada dentro del PDR 2014-2020 en la sub-medida 6.1. "Esta línea de ayudas es fundamental para favorecer el relevo generacional en la agricultura y la ganadería, por ello la administración andaluza tiene que poner todos los recursos disponibles para que resulten beneficiarios el mayor número de jóvenes posible", dice Blanque.
Por comarcas, algunas zonas en la provincia que tienen una tasa muy baja de jóvenes, como puede ser la Comarca del Alto Almanzora o la Comarca del Campo de Tabernas con un 1,9 % y un 1,5 %, respectivamente.
En este sentido, Blanque manifiesta que "es fundamental que se potencien en estas comarcas las acciones que emanan de las administraciones públicas para impulsar el relevo generacional en la actividad agrícola y ganadera".
"No olvidemos - añade la presidenta de Asaja Almería- que en estas comarcas, el principal sector económico que da vida a sus habitantes es el que representan la agricultura y la ganadería" y por tanto, concluye, "es crucial el apoyo de las administraciones para su futuro y que así se garantice la fijación de la población en los pueblos del interior".
