El próximo curso escolar 2023-24 los alumnos de primer curso de Educación Secundaria Obligatoria (ESO) de Santa Ana la Real tendrán que levantarse cada día a las seis de la mañana para ir a clase en Aracena. Lo harán porque el Colegio Público Rural (CPR) Tresfuentes no contará con unidad de Secundaria en la localidad, una dotación que las familias del colegio consideran imprescindible para que los alumnos no se expongan diariamente a “los inconvenientes y peligros” que supone someterse a una hora y media de carretera tanto para su seguridad como para su rendimiento escolar.
Así lo han expuesto en una carta que han remitido a la Delegación Territorial de Desarrollo Educativo de la Junta de Andalucía, ante la falta de respuesta favorable de la Administración a las peticiones previas que el centro escolar ha hecho en el mismo sentido. La misiva la firma no solo la Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) de Santa Ana, sino también las de las AMPAS de Linares y Alájar, los otras dos localidades que forman parte del CPR Tresfuentes.
Israel López, padre de dos alumnas que cursan Primaria en Santa Ana, explica a Viva Huelva que las familias de este centro no están pidiendo “nada extraordinario” sino que se organicen los recursos educativos para garantizar que estos niños y niñas tengan “las mismas oportunidades” que el resto de sus compañeros de otros colegios y no se vean discriminados por el simple hecho de vivir en un entorno rural.
López señala que en el actual curso 2023-24 Santa Ana no tiene unidad de Secundaria por el simple hecho de que no hay niños de esa edad en el municipio pero sí que tuvo ese grupo hasta el curso anterior. El próximo año volverá a haber alumnos de once y doce años y, por ello, el centro educativo y las familias demandan que se cambie una de las unidades de Primaria a Secundaria, de manera que los alumnos no tengan que marcharse a Aracena, “como se ha hecho en años anteriores en Santa Ana y como se sigue haciendo en otros centros”, explica López.
A las familias les duele especialmente “la falta de sensibilidad que toda la administración está teniendo en este asunto”, especialmente la Delegación de Desarrollo Educativo, porque se han limitado a rechazar la propuesta de cambio de unidad hecha desde el centro con “un escrito protocolario donde se decían ciertas inexactitudes”. Por ello, las tres ampas han decidido remitirles una carta en la que solicitan que “sean sensibles a la petición descrita y accedan a concederla, tranquilizando así a las familias que únicamente buscan las mejores oportunidades para sus hijos e hijas o, al menos, que no tengan menos que el resto de la sociedad, consiguiendo a través de su presencia en los pueblos que estos mantengan aún los servicios mínimos, en este caso, la educación pública y gratuita en el mundo rural”.
Mientras esperan una respuesta de la Junta, las ampas han decidido llevar a cabo una serie de actos reivindicativos. El pasado miércoles organizaron una concentración y este jueves iniciaron una recogida de firmas que, en solo unas horas, ya ha conseguido recabar más de 500 apoyos. Si no reciben una respuesta satisfactoria están dispuestos incluso a acudir hasta Huelva, para manifestarse ante la Delegación.
