Según ha informado el Instituto Armado en un comunicado de prensa, fue una patrulla del Destacamento de Tráfico de la Guardia Civil de Sevilla que se encontraba en la SE-30 prestando servicio de vigilancia en carretera la que observó una furgoneta que estaba cometiendo una infracción, por lo que procedieron a dar el alto al vehículo.
Tras ello, identificaron al conductor al objeto de extender el oportuno boletín de denuncia. El conductor, A.J.P., de 23 años y vecino de Sevilla, manifestó al serle requerido el permiso de conducción que carecía de cualquier permiso. Igualmente, el vehículo carecía de seguro obligatorio y no había pasado la inspección técnica de vehículos.
Los guardias civiles levantaron acta y procedieron a la inmovilización del vehículo. Además, solicitaron los antecedentes penales del conductor y comprobaron que tenía seis detenciones anteriores por carecer de permiso de conducción.
El Juzgado ordenó la intervención, comiso y depósito del vehículo. Al día siguiente, el vehículo inmovilizado no se encontraba en el lugar donde debía estar, según comprobó la Guardia Civil. Por todo lo anterior, al detenido se le imputan, además de los delitos contra la seguridad vial, otro delito de desobediencia.