En concreto, ha sido este 22 de noviembre a las 10,30 horas, cuando la Junta de Andalucía ha hecho partícipe al Ayuntamiento de Chiclana de la notificación oficial procedente del máximo órgano judicial nacional y, por ello, desde esta fecha la localidad pasará a estar regida por las Normas Subsidiarias que datan de 1987, cuando Chiclana contenía la mitad de población que ahora posee.
Núñez se ha reafirmado en que “el que ha caído es el PGOU, pero Chiclana sigue en pie, a pesar de que éste es un golpe heredado por el anterior equipo de gobierno”, recordando que “el PGOU que ha sido anulado se hizo mal en tres ocasiones y ha supuesto un gasto de cuatro millones de euros públicos que tendremos que pagar todos los chiclaneros” y ha hecho referencia al “trabajo incansable que se ha llevado a cabo desde entonces para lograr una solución momentánea que pueda paliar la crítica situación jurídica en la que queda el suelo municipal hasta que se apruebe en nuevo planeamiento local”.
En este sentido, el edil de Urbanismo ha subrayado la “gran labor realizada por todos los técnicos municipales de la Gerencia Municipal de Urbanismo, cuyo trabajo incansable ha permitido paliar esta grave situación, puesto que hemos podido estar aplicando el ya anulado PGOU de manera habitual hasta ahora y esta eventualidad ha sido positiva por el acortamiento de tiempo que se producirá entre la anulación oficial y la entrada en vigor de las Normas Transitorias”, por lo que ha afirmado que “desde la Gerencia Municipal de Urbanismo se ha hecho un trabajo eficiente de cara a solucionar en tiempo récord uno de los problemas más graves a los que se ha enfrentado Chiclana en su historia”.
El delegado de Urbanismo ha señalado que “evidentemente, no estamos ante una buena noticia para Chiclana puesto que, aunque estamos trabajando sin descanso para darle una solución a este grave problema en el menor tiempo posible, hasta que no se encuentre en vigor el nuevo PGOU, Chiclana se encontrará en una situación muy delicada desde el punto de vista urbanístico”.
La ausencia de PGOU implica directamente el parón que se produce en el desarrollo de las denominadas Áreas de Gestión Básica, que quedan fuera del terreno municipal regido por las Normas Subsidiarias, e igualmente ocurrirá con las diversas promociones de viviendas que pudieran haberse llevado a cabo en esas zonas. Como dato significativo, el edil de Urbanismo ha señalado que “la ausencia de PGOU nos impide incluso tramitar licencias para obras menores, debido a que, excepto el centro de la ciudad, parte de la playa y la Avenida del Mueble, queda calificado como zona no urbanizable, en lugar de zona urbanizable no consolidada que hasta ayer recibían”.
Ha señalado Núñez que “sin duda, las Normas Transitorias supondrán un soplo de aire fresco para la situación jurídica de Chiclana, puesto que nos permitirá aumentar el radio de terreno que podrá ser objeto de desarrollo y evolución social e industrial”.
Mirando al futuro, el edil de Urbanismo ha explicado que “Chiclana saldrá de esta situación y solucionaremos el grave problema heredado”, añadiendo que “el nuevo planeamiento está siendo ahora mismo elaborado y contiene una exposición pública, un periodo de alegaciones y una aprobación provisional. Posteriormente, será remitido a la Junta de Andalucía al objeto de que estudien la conformidad del documento redactado con las leyes urbanísticas regionales y se procederá a su aprobación definitiva”.