Las primeras grietas comenzaron a detectarse en el mes de agosto cuando las obras del aparcamiento, que se habían paralizado, se reanudaron de la mano de la promotora Resipark. Durante los últimos días un arquitecto perteneciente a la empresa que ejecuta las obras ha estado realizando fotos a algunos de los pisos para comprobar el grado de afección de los mismos.
Estas grietas han surgido sólo en algunas viviendas y locales de las inmediaciones de manera muy leve, aunque dispersas por distintas áreas.
“Han aparecido en las zonas más frágiles del local, como en la puerta o en una pared que cerramos. Los de la obra han venido a verlo y nos han dicho que no son grietas importantes porque son verticales y no afectan a muros de carga. Es normal que aparezcan cuando mueven algún terreno”, señala a Viva Sevilla un camarero de una cafetería afectada por la obras.
En este local empezaron a aparecer las grietas hace unos tres meses junto a la puerta, pero paulatinamente han ido surgiendo otras en distintas paredes, en el techo e, incluso, se han llegado a agrietar los azulejos de uno de los cuartos de baño.
Ignacia Domínguez, vecina de la plaza Rafael Salgado, descubrió algunas grietas tras unas cortinas hace un par de meses y desde entonces ha encontrado otras en la puerta de entrada y en la habitación de su hijo.
“Hoy ha venido el arquitecto para hacerle fotos a las grietas y me ha dicho que no es nada grave. El problema viene a raíz de que la obra se ha llevado mucho tiempo parada y los edificios se han resentido. Al principio, cuando metían las placas, parecía