Según ha explicado la Benemérita en un comunicado, la investigación se inició a raíz de una serie de robos con fuerza cometidos desde finales de enero en viviendas de Chiclana, principalmente cuando los moradores se encontraban durmiendo. Esto generó "gran alarma" entre los vecinos de la localidad.
Los investigadores desvelaron la existencia de un grupo organizado, responsable hasta la fecha de 32 robos en casas habitadas. Así, lograron identificar a cada componente del grupo y el rol que desempeñaba en el mismo, así como los domicilios, vehículos que utilizaban y lugares donde procedían a la venta de los efectos sustraídos, siendo en muchas de las ocasiones cocaína el pago que recibían por su botín.
Con todas las evidencias en la mano, tras obtener el correspondiente mandamiento judicial de entrada y registro para cuatro domicilios de la localidad, los agentes procedieron a llevar a cabo los mismos de forma simultánea, practicándose las nueve detenciones y recuperándose multitud de los efectos sustraídos, así como de diversas cantidades de estupefacientes y otros efectos.
Entre los objetos encontrados figuran joyas, electrodomésticos, aparatos de imagen y audio, herramientas, relojes, ordenadores portátiles, así como numerosos efectos de carácter personal. Todos ellos se encuentran expuestos en las dependencias de la Guardia Civil en la capital gaditana a fin de ser devueltos a los propietarios que así lo acrediten.
La Guardia Civil ha destacado la "indefensión y la gravedad" de los hechos investigados, por cuanto pueden desembocar en la comisión de delitos más graves en el supuesto de que alguno de los habitantes llegara a sorprender a los autores en el interior de la vivienda.
A esto ha añadido la presencia de menores, como en una ocasión en la que el robo se produjo en una casa en la que el hijo del denunciante, de seis años de edad y que sufre terrores nocturnos, se encontraba durmiendo en el sofá del salón, siendo quien dio la voz de alarma ante la presencia de extraños. También alude al robo en la casa de una anciana impedida, la cual escuchó "aterrada" cómo desvalijaban su vivienda.