Se esperaba la firma para el viernes, se siguió esperando para ayer, pero nada, no llega. El acuerdo definitivo entre los abogados de Antonio Muñoz Vera y el ayuntamiento de la ciudad en referencia a la concesión del estadio Ramón de Carranza se sigue haciendo de rogar para desesperación de los aficionados.
Con sólo tres futbolistas en plantilla, sin cuerpo técnico y con todo por hacer, el club cadista sigue a la deriva hasta que se alcance un acuerdo sobre este punto, condición indispensable para que luego se produzca el traspaso de acciones entre su actual dueño y el murciano Quique Pina.
Los famosos “flecos” una y otra vez aparecen cuando el Cádiz CF debe cerrar una operación. Durante todo el lunes, ambas partes siguieron tratando de alcanzar a un acuerdo definitivo, puesto que las bases para ello están sentadas desde la semana pasada, pero el asunto se está alargando más de lo deseado y el reloj no perdona.
La “plantilla” ha sido citada para iniciar la pretemporada el próximo día 17 de julio, pero antes de eso debe conocerse el grueso de jugadores que la integrarán. Si Quique Pina continúa al frente, como parece que será con total probabilidad, muchos futbolistas del pasado curso repetirán su experiencia vestidos de amarillo, por lo que se minimizaría esta pérdida de tiempo. Por si acaso, José Manuel Barla continúa perfilando una plantilla alternativa por si el empresario murciano se harta de esperar.
