Rota se sumaba ayer a las numerosas protestas convocadas en toda España como forma de rechazo a las distintas medidas económicas aplicadas por el Gobierno de España. El Bloque Ciudadano fue el colectivo del que partió la iniciativa de una concentración en la plaza de la Cantera, pidiendo a la gente que acudiese con camisetas negras contra lo que consideran "continuos abusos al pueblo" por parte del Gobierno del Partido Popular.
La plaza de la Cantera, punto de encuentro, comenzaba a recibir gente a las ocho y media de la tarde, y pasadas las nueve, y habiéndose reunido del orden de 500 personas, la organización decidió realizar una corta manifestación con el apoyo de la Policía Local, que se ocupó de ir cortando el tráfico para salvaguardar la seguridad de ciudadanos y manifestantes.
Numerosos colectivos se vieron reflejados en esta masa ciudadana descontenta, desde docentes, funcionarios municipales, y ciudadanos independientes, hasta comerciantes, representantes de asociaciones y por supuesto desempleados, que con distintas pancartas, quisieron hacer llegar a sus conciudadanos los problemas que están sufriendo actualmente. Los carteles hablaban de los recortes, el apoyo a los bancos por parte del Gobierno, e incluso la situación de los preferentes bancarios también tuvo su espacio en los lemas mostrados en esta manifestación. Las consignas, muchas las de siempre, cargaban contra la clase política como principal culpable de esta situación ("el próximo parado, será un diputado"), y animaba al resto de vecinos de Rota a unirse a la causa, con gritos como "a ti que estás mirando, también te están robando". Hizo efecto, ya que en su recorrido por las calles de Rota la manifestación llegó a concentrar a casi 700 personas.
Los manifestantes salieron de la plaza de la Cantera para recorrer María Auxiliadora hasta situarse frente a la sede del Partido Popular de Rota, donde se detuvieron por espacio de unos quince minutos, para posteriormente continuar hacia la avenida de la Marina, volver a bajar por la avenida San Fernando, e iniciar camino por María Auxiliadora hacia el Castillo de Luna, punto final de la manifestación.
Allí se abría el turno de palabra a los ciudadanos presentes, y nunca antes se había observado tal nivel de participación. Los presentes escucharon de boca de la directora de uno de los centros de infantil de la localidad su situación, que habían denunciado por la mañana en Sevilla, ya que no cobran las ayudas de la Junta desde el mes de mayo. También escucharon a la representante de una asociación local, que reclamó ayudas para los colectivos de apoyo social, y el recorte de privilegios a los políticos. Una joven desempleada propuso realizar un envío masivo de currículums a la sede del Partido Popular en Génova, en Madrid, para demostrar que los parados "no nos quedamos quietos y dejamos de buscar empleo", y también se dio a conocer a los ciudadanos la situación de un ex empleado de Mercadona que fue despedido por estar de baja, pero que finalmente, aunque no ha sido readmitido, ha conseguido un despido con las condiciones que solicitaba.
El Bloque Ciudadano hacía entonces lectura de un manifiesto, donde rechazaban el "baile de los políticos al son de los mercados", a los que acusaron de hacer reinar el "desgobierno político" y de "barrer de un plumazo las conquistas sociales conseguidas después de tantos años". También hubo duras críticas hacia la reforma laboral, hacia el tristemente famoso "Que se jodan" de una diputada del PP en el Congreso, y "el continuo descredito hacia el funcionario".
La poetisa María del Mar Moreno cerraba las intervenciones con un encendido poema sobre la lucha de los ciudadanos andaluces, que ponía fin a una convocatoria que sin duda superó todas las expectativas de sus organizadores, que ya han anunciado nuevas movilizaciones.
