El Partido Comunista de China (PCCh) ha iniciado una investigación interna sobre la fortuna oculta que supuestamente posee la familia del primer ministro del país, Wen Jiabao, basándose en el reportaje publicado la semana pasada por el diario estadounidense 'The New York Times'.
Según fuentes consultadas por el diario hongkonés 'South China Morning Post', Wen ha enviado una carta al Comité Permanente del Politburó --el máximo órgano ejecutivo del PCCh--, en la que solicita la apertura de una investigación interna sobre los activos de su familia.
Al parecer, el Comité Permanente del Politburó ha aceptado la petición del primer ministro, aunque las fuentes no han detallado cuándo comenzará la investigación ni si sus resultados se darán a conocer a la opinión pública.
Algunos veteranos del PCCh ya se habían adelantado a esta solicitud, exigiendo a Wen que detallara el patrimonio de su familia, especialmente en lo tocante a Ping An, una empresa que, de acuerdo con el diario estadounidense, sirve de vehículo de inversión para su círculo cercano.
Los veteranos del PCCh, contrarios a la línea liberal impuesta por Wen en el Gobierno, están molestos porque, a pesar de las revelaciones del 'NYT', la prensa china de ultramar, que normalmente critica a los líderes continentales, ha alabado la reacción del primer ministro.
Algunos de estos medios de comunicación han apuntado que Wen ha impulsado la investigación interna para promover la aprobación de la llamada 'ley de la luz', paralizada desde hace años, que establece la obligación para los líderes chinos de declarar el patrimonio familiar.
Tanto Wen como su familia han desmentido la información del 'NYT', asegurando que no poseen una fortuna oculta y que sus negocios son legales en el gigante asiático. Además, el primer ministro se ha ofrecido a publicar sus cuentas personales.
UNA FORTUNA OCULTA
El 'NYT' reveló que los familiares y amigos de Wen poseen participaciones en una amplia red de empresas por valor de 2.700 millones de dólares (2.087 millones de euros), basándose en los informes corporativos y de los entes reguladores emitidos entre 1992 y 2012.
La fortuna familiar se ha forjado en paralelo al ascenso de Wen en los órganos de poder de China, sobre todo desde 1998, cuando fue nombrado viceprimer ministro y 2003, cuando fue nombrado primer ministro, cargos por los que le competen las decisiones sobre los movimientos de capital de las empresas chinas y la inversión pública en determinados sectores.
Gran parte de la riqueza de la familia del primer ministro está en manos de su mujer, Zhang Beili, a la que popularmente se conoce como 'La Reina de Diamantes', porque ha conseguido toda su fortuna en el negocio de la comercialización de joyas en China.
Otro de los grandes beneficiarios de los negocios familiares es el único hijo del matrimonio, Winston, de 40 años de edad, conocido como 'El Principito', que junto a su mujer ha hecho lucrativos negocios en la industria tecnológica, electrónica y financiera.
El hermano pequeño del primer ministro también se ha beneficiado directamente de la gestión de Wen, ya que es el propietario de una compañía que ha conseguido más de 30 millones de dólares (23 millones de euros) en contratos y licencias estatales.
También destaca el papel de Duan Weihong, amiga íntima de la mujer del primer ministro y directora de Taihong, una compañía que gestiona las acciones de los familiares y amigos de Wen en Ping An, valorada actualmente en 60 millones de dólares (46 millones de euros).
Las revelaciones del 'NYT' podrían perjudicar a Wen de cara al Congreso del PCCh, en el que se elegirá a la nueva cúpula de poder del gigante asiático, y en el que el primer ministro espera ver colmadas sus aspiraciones de llegar a la cúspide del régimen comunista como presidente.