El tiempo en: Cádiz

Cádiz

Una empresa facilita la estancia en Cádiz a los extranjeros

La mercantil gaditana Inpar3 promueve el intercambio lingüístico y cultural en la capital

Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
Publicidad AiPublicidad AiAndaluc�a Informaci�nPublicidad AiPublicidad Ai
  • Las creadoras de la agencia Inpar3, África Enríquez Osuna e Inmaculada Balboa Vázquez.

Son tiempos de crisis y en ellos, las ideas e iniciativas empresariales valientes se salen de lo común y son dignas de admiración. Así, la empresa Inpar3, acaba de abrir sus puertas en la gaditana plaza de Topete ofreciéndose como plataforma para prestar asistencia y apoyo logístico, así como para facilitar la movilidad geográfica a todas aquellas personas interesadas en aprender un idioma o conocer otra cultura.

Dos empresarias gaditanas, África Enríquez Osuna, licenciada en traducción e interpretación por la Universidad de Johannes Gutenberg de Maiz en Alemania e Inmaculada Balboa Vázquez, técnico en recursos humanos y graduado social por la Universidad de Cádiz son las promotoras de Inpar3, empresa nacida en Cádiz como Sociedad Limitada el 7 de diciembre de 2012, que además de ser una agencia de intercambio lingüístico y cultural, se sustenta en la Asociación Inpar3 Cádiz, que intenta fomentar el tejido empresarial y el turismo de la provincia de Cádiz, gracias a la colaboración de profesionales autónomos y empresas gaditanas.

Son tres los programas en los que se basa esta joven empresa: Au pair, de alojamientos y de intercambio lingüístico y cultural.

Al primero de ellos supone una estancia de un chico o chica extranjero, generalmente estudiante, de 18 a 30 años de edad, en casa de una familia anfitriona, a cambio del cuidado de los niños y la participación en las tareas domésticas y también en el acompañamiento de personas mayores. Este estudiante es acogido en la familia bajo régimen de pensión completa, percibiendo como contraprestación una gratificación mensual o semanal previamente estipulada. Durante el tiempo de su estancia, el joven au pair debe comportarse debidamente y ser tratado como un miembro más de la familia, no como un empleado. Además del trabajo au pair propiamente dicho, el Consejo Europeo de la Juventud incluye dos modalidades más, que son Ayuda-madre, cuyo horario de trabajo es de ocho horas, se dispone de menos tiempo libre pero la remuneración es superior y el semi au pair, en el que  las horas de trabajo son inferiores, se tiene derecho a alojamiento y manutención, pero sin dinero de bolsillo. Es el caso del au pair que colabora de 10 a 15 horas en la casa de la familia, dando clases de idioma y conversación a los pequeños. La estancia como au pair es por lo tanto un intercambio de servicios que beneficia tanto al joven au pair como a la familia anfitriona. Esta experiencia ofrece efectivamente la oportunidad para el joven au pair de descubrir un nuevo entorno, un nuevo país, nuevas costumbres, una nueva cultura y aprender o mejorar al mismo tiempo otro idioma a bajo costo. En cuanto a la familia anfitriona, ésta también puede conocer a alguien de otra cultura, los hijos practican una lengua extranjera y cuentan con este nuevo miembro para ayudar en las tareas cotidianas a la familia, y todo ello al menor precio. Por lo tanto, es una oportunidad enriquecedora tanto para el joven au pair como para la familia anfitriona.

Asimismo, el programa au pair es una buena fórmula para conocer un país determinado, y más adelante, allí mismo, poder encontrar otro trabajo más en consonancia con el perfil académico que se tenga.

El régimen au pair se encuentra regulado por el Acuerdo del Consejo de Europa de 24 de noviembre de 1969. España se incorporó al acuerdo el 24 de junio de 1988 (BOE núm. 214 de 6 de septiembre de 1988). Más tarde, se aprobó la Resolución de 15/6/89 del Ministerio de Asuntos Exteriores (BOE núm.152 de 27 de junio de 1989) referente al trabajo au pair.
El programa de alojamientos está dirigido a estudiantes, profesores, licenciados  universitarios y profesionales que estén  interesados en el conocimiento y el aprendizaje de un idioma y de una cultura.

Todos los alojamientos son cuidadosamente seleccionados por la empresa, cuyo objetivo es proporcionar un servicio de calidad, ajustando la asignación del alojamiento a las necesidades y preferencias de cada persona,

Así, existen diferentes opciones de alojamiento disponible, como son pisos compartidos, familias y  residencias. También existen otras opciones tales como albergues y hostales. Y dependiendo de las características del alojamiento, los precios pueden variar.

El programa intercambios se basa en la hospitalidad recíproca alternada. Durante la estancia se participa en la vida cotidiana de la familia, lo que permite disfrutar de una inmersión cultural y lingüística en las mejores condiciones posibles.Esta fórmula necesita una implicación personal importante, una gran disponibilidad, un determinado sentido de organización y, por supuesto, condiciones materiales de hospedaje suficientes por parte de cada una de las familias. Otra modalidad existente en este programa es el intercambio de vivienda o alojamiento, una oferta especialmente dirigida a aquellas personas o grupos de personas que prefieran mantener su independencia.Este programa de intercambio cultural y lingüístico está destinado a jóvenes europeos de entre 17 y 30 años, a profesores, pero también a todos aquellos ciudadanos nacionales y extranjeros que quieran aprender, mejorar o perfeccionar un nivel de idioma o bien conocer otro país e impregnarse de su cultura.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN