Campillos se ha levando esta mañana con una noticia que ha conmocionado a toda la localidad. Un vecino se han encontrado el cadáver de cuñado, Diego G. P, de 32 años, en su domicilio, donde también el cuerpo sin vida de la hija del fallecido, de seis años.
Se había dirigido a la vivienda para recogerlos y trasladarlos hasta la Estación de Santa Ana, desde donde la pequeña iba a viajar hasta Mataró (Barcelona), lugar en el que residía junto a su madre y los padres de ésta. Los progenitores se habían separado a finales del pasado años y la niña se encontraba en Campillos disfrutando de sus vacaciones de Semana Santa.
Según ha confirmado la Delegación del Gobierno en Andalucía el padre tenía una condena de seis meses de prisión, del pasado mes de diciembre, por violencia de género contra su expareja, aunque se encontraba suspendida. Además fue condenado por el Juzgado número 3 de Antequera a una pena de seis meses de cárcel y a la prohibición de acercamiento y comunicación hacia su expareja por un periodo de dos años. Eso sí, estas medidas no se habían aplicado con su hija.
En torno a las doce del mediodía los cuerpos eran trasladados hasta el Instituto Anatómico Forense de Málaga para esclarecer la causa de ambas muertes, especialmente de la menor, hallada en su habitación. “Todo apunta a que ha sido un homicidio pero esto no se puede confirmar. Lo que sí es que la niña aparece muerta en su cama y se le hará la autopsia”, ha comentado el alcalde de Campillos, Jesús Galeote.
El Ayuntamiento de Campillos ha decretado dos días luto oficial. Tras conocer la noticia, la Junta de Portavoces del consistorio mantuvo una reunión urgente y extraordinaria donde para acordar esta medida, así como el que las banderas del Consistorio ondeen a media asta.
Galeote, que regresaba de la inauguración de una nueva casa de oficios, no se explicaba como había ocurrido este trágico suceso en “una familia muy buena” y que siempre han mantenido una excelente convivencia con sus vecinos. “Es espeluznante lo que ha sucedido, no se lo esperaba nadie. Uno nunca espera que en un pueblo tan tranquilo como el nuestro ocurran estas cosas”, ha manifestado ante los medios de comunicación.
