A media tarde, todavía en un despacho que no concibe como suyo y reconfortado por la comida familiar, el recién elegido alcalde de Sanlúcar recibe a Sanlúcar Información para explicar cuales son los objetivos de su Gobierno, cómo ha llegado a convertirse en la persona de confianza de Irene García y su sucesor, y que ambiciona para esta ciudad.
Durante la entrevista suelta lo que, sin duda, marcará su entrada en el Gobierno municipal. Una reducción del sueldo de más de 10 mil euros con respecto a etapas anteriores del Gobierno municipal. Cobrará 50.000 euros. Lo hace, dice, convencido de que es una medida justa. Es su carta de presentación, el resto, lo desvela a lo largo de esta entrevista.
—¿Se imaginó alguna vez ocupando este despacho?
—Desde luego no era mi intención. Cuando me presenté a las elecciones desde 2003 mi intención era trabajar por la ciudad, representar a mi partido y, cuando era Irene la candidata, defendiendo el proyecto que ella lideraba. Nunca trabajé para tener este puesto pero por responsabilidad entiendo que en estos momentos tengo que ejercerlo y lo voy a hacer con la ayuda de todos.
—¿Cree que la ciudadanía ha entendido la decisión de la alcaldesa, y que sea usted quien abandere ahora el proyecto?
—Era una quiniela y lo hablábamos cuando Irene tomó esta decisión. Cada vez que ha habido algún cargo desde la época de Zapatero hasta los últimos tiempos, la ciudadanía ha entendido, por su valía y por lo que ha demostrado, que realmente fue una gran revolución en el partido, encontramos en ella una persona que defendía nuestros intereses y que conectó con la ciudadanía y siempre la vieron como que podía acceder a estos cargos. Entiendo que la ciudadanía sabía que antes o después Irene iba a salir de esta ciudad. ¿Qué iba a ser en este momento? No lo sé. Ella ha explicado sus motivos. A nosotros nos ha provocado tristeza porque han sido muchos años trabajando conjuntamente, pero también la apoyamos. Entiendo que los ciudadanos lo esperaban y que ha llegado el momento momento para ella y para todos y lo que tenemos que hacer es trabajar para dejar alto la labor que ella ha hecho y el camino que ha emprendido. Cuando se da esta situación, si había alguien –no sólo por lo que dice la ley de que es el número 2 el que la sustituye – también como secretario local del partido y siendo el compañero que, junto a ella, comenzamos en 2003 esta andadura, tanto los compañeros del grupo socialista como de la ejecutiva entendieron que era yo quien debía sustituirla, que era la opción que más suponía un proyecto continuista y más conocía esta idea de Sanlúcar que hace años empezamos a trabajar.
—¿Qué siente ahora al asumir esta responsabilidad ¿Vértigo?
—No es vértigo. Es cierto que he estado aquí mucho tiempo, que me he encargado de las tareas más internas, de que salieran los proyectos, una labor de fontanería tanto en el ayuntamiento como en el partido. Pensaba que no iba a haber tanta diferencia y si la hay, tanto en la relación con los ciudadanos como con los colectivos. Yo sigo llegando a pie al Ayuntamiento, subiendo la cuesta de Belén, voy a hacer mi compra... Los ciudadanos me han acogido bien, tienen la misma ilusión que yo porque este proyecto salga adelante.
—Han dicho sus compañeros de usted que es quien mejor conoce el Ayuntamiento, que es honesto y eficaz en la gestión, ¿demasiada responsabilidad para no defraudar?
—Sí es cierto que soy muy responsable. Me exijo mucho igual que este equipo (de Gobierno) al completo. Cuando hacemos grandes proyectos ya estamos pensando en otro futuro y en qué hay que mejorar.
—En 2007 se encontraron un Ayuntamiento con 237 euros en caja, 108 millones de euros de deuda, 14 millones de facturas en los cajones y a pocos días de pagar 1,6 millones de euros en nóminas. ¿Qué hereda ahora?
—Ahora una cuenta mucho más saneada. Pero, sobre todo, lo que ha cambiado es el concepto de este ayuntamiento. Seguimos siendo un ayuntamiento con muchos problemas, sobre todo de liquidez, pero sí hemos ganado en credibilidad. Esa tarea ha sido muy difícil y creo que los ciudadanos la han sabido apreciar.
—¿Cuáles son sus objetivos?
—Los ciudadanos ya no se creen grandes promesas ni grandes proyectos. Vamos a pelear por todos los proyectos que tenemos. Sanlúcar lo merece, lo necesita y además creo que es el momento de Sanlúcar. Lo creo realmente. Pero nuestro principal objetivo como en los últimos años siguen siendo los ciudadanos. Son momentos muy complicados, muy difíciles, en los que tenemos que atender necesidades básicas. A partir de ahí las prioridades que tenemos que tener, al ser una ciudad turística. Entendemos que el turismo, además de nuestro patrimonio gastronómico y cultural es lo importante, tendremos que reforzar la limpieza, el mantenimiento de las playas y una serie de aspectos para la mejora de la ciudad.
—Hay un proyecto, el del mercado de abastos, que ha sido la espina de la ex alcaldesa y que entiendo que se va a convertir en su caballo de batalla de aquí a final de legislatura. ¿Qué problema existe?
—Es nuestra apuesta y nuestro compromiso. Es el proyecto que más defendemos y peleamos. Queremos que se haga, que el mercado se arregle. Si hay que cambiar el proyecto se cambia, pero Sanlúcar y los comerciantes necesitan una mejora del mercado de abastos.
—Quiere dignificar la política ante la desconfianza de los ciudadanos. ¿Cómo se consigue eso cuando la sociedad censura los sueldos de los cargos públicos, cuando se desconfía de su gestión ante los casos de corrupción...?—Se consigue con honestidad. Creo que la amplísima mayoría de políticos y concejales hacen un enorme trabajo y sacrificio por luchar por los intereses de su ciudad. Es cierto que lo que es noticia es la corrupción, que condeno, porque provoca que la política esté mal vista. Cuando el ciudadano ve que eres honrado, que usas el dinero que recaudamos, que tanto trabajo le cuesta ganar, adecuadamente, sin derroches, cumpliendo con la ley. Eso es prestigiar la política. En cuanto a los sueldos, hay mucha demagogia. Opino que debe haber unas reglas para que esté tasado lo que debe ganar cada concejal y cada alcalde.
—¿Cuál va a ser su sueldo?
—Voy a tener un sueldo de 50.000 euros. Si se compara con sueldos de otros años y otros alcaldes, teniendo en cuenta que la alcaldesa en los últimos años no cobraba del Ayuntamiento, va a parecer más pequeño. Pero si lo comparamos con la situación que viven muchos ciudadanos, va a parecer mucho. Desde luego, va a ser para trabajar por la ciudad.
—¿Cómo afectará la reforma de la Administración Local a Sanlúcar?
—En principio parece que no nos afecta, aunque están cambiando la ley continuamente. No nos afecta ni en número de concejales liberados, ni sueldos ni cargos de confianza. Ya hicimos el esfuerzo cuando llegamos, cuando había 55 funcionarios de empleo. Eso se redujo. Lo que es cierto es que la Administración local es fundamental y lo que necesitamos es una financiación adecuada a los servicios que prestamos.
—Pacto de gobierno. Desde el minuto 1, CIS anuncio apoyo al proyecto socialista que antes lideraba Irene García y ahora encabeza usted. Que valora de los independientes? Que han aportado en estos años al gobierno municipal?
—Han aportado estabilidad al Gobierno, lealtad al pacto y un compromiso importante con la ciudad. Son grandes trabajadores, comprometidos, que han dado estabilidad.
—De la oposición, le han tendido la mano desde PA y PP, más exigentes desde las filas populares y su entrada con IU no ha sido de las mejores... ¿Cree que encontrará más aliados de los que se postulan ahora?
—Siempre digo que debe haber respeto ante todo. En los temas de ciudad tenemos que ir de la mano. Como usted dice, IU ahora mismo tiene una consejería en la Junta y unas responsabilidades de las que tiene que beneficiarse Sanlúcar. IU tendrá que trabajar para traer los proyectos que dependan de sus consejerías: accesos a la ciudad, mercado de abastos… Entiendo que tiene que trabajar en ese sentido al igual que el PP tiene que trabajar para todos los proyectos que tenemos tanto con la Diputación como con el Estado, como es el corredor litoral. Más allá de las diferencias ideológicas, los que nos presentamos a las elecciones, y quiero pensarlo así, queremos lo mejor para Sanlúcar. Seguro que tendremos que tener su apoyo porque si no difícilmente le podrán explicar a la ciudadanía, que por arañar algún voto se han perdido grandes oportunidades y proyectos.
—Acabamos de culminar un verano muy exitoso en cuanto al número de turistas pero en el que también se han evidenciado los escasos recursos de la administración local en crisis.
—Parece que ha sido la tónica en todas las ciudades. Cuando hay recortes, y eso es lo que tenemos que evitar, pagan muchos de los servicios. Hemos tenido un plan de ajuste que decíamos que era bueno desde una perspectiva, la de las empresas, para poder pagarles. Pero nos ponía en una situación muy complicada de liquidez. Hemos visto como las empresas municipales, con una ley también del Gobierno, si llegaban al año 2015 con pérdidas, tenían que desaparecer. En los últimos años, en Emulisan, hemos tenido que obtener un beneficio de 1,2 millones de euros para eliminar esas pérdidas. Eso se ha hecho con muchísimo esfuerzo y, sobre todo, más allá de un titular, lo que tenemos que pensar es que eso afecta a más de 300 familias de Sanlúcar que ahora pueden estar tranquilos porque su empresa está saneada. Hay que hacer muchos esfuerzos y todos tenemos que poner de nuestra parte.
—Le voy a nombrar varios proyectos y asuntos que atañen a Sanlúcar y quiero que me defina su posicionamiento al respecto: Circunnavegación: proyecto muy importante en el que tenemos que hacer mucha pedagogía y concienciación ciudadana. Legalización viviendas: el decreto de la Junta es una gran oportunidad que ya vamos a comenzar a trabajar. Vamos a dar una solución a más de tres mil edificaciones. Desde ya se pueden realizar los trámites en la GMU, aunque haremos una campaña informativa para todos los ciudadanos. Desempleo: nuestra mayor preocupación. Nunca un dato es bueno. Mientras que haya desempleados hay drama pese a que hablemos de que lleva seis meses bajando. Es algo para lo que hay que trabajar todos juntos. Suelo industrial: un gran reto que necesita un cambio en la financiación. Podemos tener suelo pero si las empresas no tienen crédito no se pueden instalar. Nuevo parque de bomberos: Ya tenemos el suelo cedido y esperemos que antes de 2015 ya tengamos el parque de bomberos construido. Conflicto policial: puede haber una solución desde el diálogo y el entendimiento. En breve podremos dar noticias en este sentido. Complejo deportivo Dehesilla: estamos viendo esta inversión con la Junta, así como otras para esta zona. No vamos a perder esa oportunidad y si se cambiara de proyecto lo invertiríamos también en otro proyecto deportivo en la ciudad.
—Quedan apenas dos años para las próximas elecciones municipales. ¿Que quiere conseguir de aquí a esa fecha?
—Primero una ciudad estable, con unos buenos servicios y que se sienta orgullosa de ser ciudad. Que los sanluqueños nos concienciemos de que Sanlúcar es importante cuidarla entre todos. Quiero que algunos proyectos se inicien, aunque entiendo que la situación es difícil. Quiero una ciudad orgullosa de su Ayuntamiento, de sus políticos y de sí misma como ciudad. Es una tarea difícil, pero creo que puede conseguirse remando todos en la misma dirección.
—¿Será cabeza de lista del PSOE para las próximas elecciones municipales?
—Eso, en mi partido, lo elige la asamblea.