El Juzgado de lo Penal número 2 de Huelva ha acogido este miércoles el juicio contra dos extrabajadores de la empresa Damas, acusados de quemar dos autobuses en mayo de 2011 en la zona del Condado, una vista en la que éstos han negado los hechos y las defensas han alegado vulneración de derechos fundamentales, así como la no existencia de pruebas que vinculen a estas personas con lo sucedido.
Durante el juicio, según ha confirmado a Europa Press el letrado de uno de estos extrabajadores, Luis de los Santos, se han alegado vulneración de derechos fundamentales, como el de secreto de las comunicaciones, y la impugnación del testigo protegido, al considerar que "no estaba motivada su protección".
Esta última cuestión ha sido estimada por el juez, por lo que el próximo 4 de noviembre, que es cuando se reanuda la vista, este testigo declarará a cara descubierta. Los letrados han solicitado a su vez tener un proceso con todas las garantías legales.
En esta primera sesión han declarado responsables de la empresa, quienes han asegurado "sus sospechas" de los miembros de la Confederación General del Trabajo (CGT) por "la conflictividad" existente, sin embargo integrantes de este sindicato han negado esta situación.
Según reza en el escrito del Ministerio Fiscal, la Fiscalía pide para cada uno la pena de tres años de prisión y una indemnización conjunta de casi 60.000 euros por un delito continuado de daños.
Por su parte, la acusación particular, representada por la empresa, ha pedido una pena de cuatro años y una indemnización de más de 500.000 euros por este mismo delito, asegurando que ambos en esas fechas decidieron cumplir las amenazas, que "previamente habían manifestado", contra bienes de la empresa, en la que uno de ellos había sido despedido y el otro prestaba sus servicios en esos momentos, dirigiéndose a la localidad sevillana de Santiponce y prendiendo fuego a un autobús.
Los hechos, según señala la Fiscalía, se remontan a mayo de 2011 cuando estas dos personas, sin antecedentes penales, se dirigieron a una gasolinera de Matalascañas de forma conjunta y, con ánimo de menospreciar la propiedad ajena, causaron destrozos en dos autobuses, uno estacionado en Almonte y otro en Hinojos, dañando a su vez la parada donde se encontraba aparcado éste último.
Coincidiendo con este juicio, miembros de la CGT han convocado una concentración de apoyo a estas dos personas frente al Palacio de Justicia.
