Metidos de lleno y en la recta final de octubre, todavía son pocas las participaciones de lotería de Navidad de las hermandades en la calle. Y no porque no quieran vender, ya que en el mismo agosto vendían décimos, sino porque la nueva normativa de loterías acerca de las participaciones, destinadas a identificar a todos los premiados para el pago del correspondiente gravamen fijado por el Gobierno de Mariano Rajoy, obliga a una autorización administrativa y a una serie de condicionantes que, una vez conocido por las hermandades, está ralentizando la salida de las participaciones.
Como ya denunciara este medio hace más de 4 años respecto a la ilegalidad que suponía cobrar un 20 por ciento de la participación, cuando lo que fija la ley es un máximo de un 20 por ciento de lo que se juega, las autorizaciones están llevando a que se cumpla con la normativa.
Este año se juega más porcentaje
De esta forma, subirá la cantidad que el comprador juega en cada participación, ya que el donativo final corresponde al 20 por ciento de la cantidad que se juega.
En la calle hay participaciones, que no cuentan con el permiso de la Sociedad Española de Loterías y Apuestas (SELAE) y por tanto la cuantía que cobrar como margen de beneficios es mayor que la autorizada.
Varias hermandades isleñas cuentan ya con la autorización oportuna y otras siguen tramitándola, de ahí que las participaciones no estén todavía en la calle y así se puede ver cómo faltan otras muchas de hermandades en los establecimientos de San Fernando. No obstante, todas trabajan contra el reloj, porque saben que a menos tiempo, hay menos venta y eso disminuye los posibles beneficios.
