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Ronda

El Ayuntamiento decide vender también el local de Participación de calle Molino para obtener ingresos

Martínez asegura que la enajenación de patrimonio municipal es la única manera de ingresar dinero para inversiones. El local, de 50 metros, se subasta a partir de 140.000 euros

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El Ayuntamiento de Ronda ha anunciado hoy su nuevo intento por deshacerse de patrimonio municipal para obtener ingresos, y en concreto ha hecho pública la subasta del local situado en la calle Molino, que venderá al mejor postor a partir de 138.054 euros, anunció la concejal de Patrimonio y Economía, María del Carmen Martínez.

Se trata en concreto de un local de 57 metros cuadrados, con una superficie útil de 50,67 metros, que había venido siendo utilizado la pasada legislatura como sede de la delegación de Participación Ciudadana y del Defensor del Ciudadano, además de tenencia de Alcaldía: "es un local situado en el centro de la ciudad, y que está completamente terminado en cuanto a su construcción. Por ello se encuentra en condiciones de acoger cualquier tipo de actividad", animaba la concejal.

La tramitación y procedimiento para su adjudicación es abierto y por subasta, teniéndose en cuenta, como se ha dicho, el precio más alto. Las distintas propuestas se pueden presentar en el Servicio de Atención al Ciudadano (SAC) del Ayuntamiento, hasta el próximo día 3 de enero de 2014.

La concejal explicó que este es el único modo de conseguir ingresos que permitan la inclusión de inversiones en el presupuesto: "Es la única forma que tiene el Ayuntamiento de poder realizar inversiones, porque seguimos con la paralización de los ingresos procedentes de Merinos y hasta que este tema no esté resuelto estas medidas son las únicas que nos quedan para seguir acometiendo acciones de inversión que tan necesarias son en Ronda".

El Ayuntamiento ya decidió en su día poner a la venta el Cortijo San Juan, así como también la Casa del Jalifa, creando especialmente esta última decisión una enorme polémica en la ciudad al entender los grupos de la oposición y otros muchos agentes sociales que el Consistorio no debería desprenderse del viejo palacete en el que se invirtió más de 1 millón de euros de dinero público para su rehabilitación.

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