El caso del CEIP Sagrada Familia de Las Torres ilustra a la perfección las paradojas en las que pueden incurrir las administraciones competentes, en este caso la Delegación provincial de Educación, bien por la falta de información o bien por otras razones. Mientras los propios padres del centro han pagado de su bolsillo a través de la AMPA la instalación de aires acondicionados en las distintas clases, y es el único colegio de Jerez que a día de hoy tiene pizarras digitales en todo el ciclo de Infantil, y buena parte de Primaria, la Junta les ha suprimido una de las dos líneas de 3 años de este ciclo, de manera que, salvo que Educación rectifique por la demanda, para el curso próximo sólo contarán con cuatro clases de Infantil entre la de tres, las dos de cuatro años y la de cinco. Una medida que la Administración andaluza sólo ha tomado para esta unidad y otras dos más de colegios públicos de la ciudad, sin que en el caso del Sagrada Familia haya un problema de falta de demanda o de espacio. Todo lo contrario. De las 40 aulas del colegio, sólo 23 están ocupadas actualmente.
Unas circunstancias que explican el enfado generalizado de la comunidad educativa de este colegio, al que no le ha hecho ninguna gracia que Educación haya optado por esta decisión y otros centros educativos como La Unión, por ejemplo, como señalan desde la AMPA, se les haya concedido una unidad más de tres años, de manera que son cuatro las que ofertarán para el curso 2014/2015 pese a que normalmente el colegio suele completar la tercera con los niños no obtienen plaza en el primer centro solicitado. Para las familias del Sagrada Familia, lo que les está ocurriendo evidencia más que nunca la “discriminación” que sufre su centro pese a ser uno de los que mejores prestaciones ofrece.
Esta medida de Educación, sumadas al hecho de que el colegio sólo esté adscrito al IES Josefa de los Reyes, en San Juan de Dios, trae por la calle de la amargura a los padres. No entienden cómo en una zona próxima a cuatro institutos del entorno del Polígono San Benito como el IES Álvar Núñez, Andrés Benítez o Princesa Sofía, entre otros, sólo les asignan este centro, mientras que a su colegio “vecino” del Alfonso X El Sabio le corresponde el IES Andrés Benítez. Llevan más de tres años enviando cartas a la Delegación provincial de Educación sin que hasta la fecha les haya contestado a alguna de sus misivas.
No piden que les cambien como instituto preferente el Josefa de los Reyes, porque saben que hay familias de la zona cuyos hijos estudian en el colegio, pero sí que le den otro instituto más de referencia para elegir. De hecho la situación ha llegado a tal extremo que ya hay padres que están dispuestos a cambiar a sus hijos de colegio y sacrificar su equipamiento con tal de que Secundaria la cursen en otro centro.
Como aseguran, no quieren que a su postura se achaquen connotaciones relacionadas con la conflictividad de la zona, pero lo cierto es que esta realidad también pesa aunque ellos prefieran no decirlo abiertamente. Esta semana han dado un ultimátum a la Junta: si nadie les recibe, se plantarán en Cádiz y se manifestarán si es necesario para que les escuchen. La decisión final la tomarán esta semana. Sin embargo, no todo está perdido. El viernes en una reunión que la dirección del centro había pedido hace semanas, en el área de planificación de estudios se comprometieron a estudiar la posibilidad de asignarles también como instituto preferente el Andrés Benítez, a la par que harían lo propio con el Alfonso X El Sabio, de manera que a ambos les correspondería este último y el Josefa de los Reyes. Eso sí, de verlo factible, sería para el curso 2015/2016. Ahora necesitan “amarrar” un compromiso por escrito.