Agentes de la Guardia Civil pertenecientes al Puesto de Boadilla del Monte han logrado desmantelar dos puntos de venta ubicados en la Comunidad de Madrid desde donde se estaban realizando la venta de vehículos de segunda mano a los cuales habían manipulado el odómetro, ha informado la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid.
Las investigaciones, iniciadas en noviembre de 2013, se iniciaban tras tener conocimiento de la excesiva actividad de compra-venta de vehículos usados que se estaba desarrollando aportando datos que llevaron a los agentes a realizar una exhaustiva búsqueda en Internet, localizando los anuncios donde se realizaban la venta de los vehículos.
El estrecho seguimiento al que fueron sometidos permitía identificar a dos empresas, una situada en la localidad de Parla y otra en Alcalá de Henares, en las que la casi totalidad de los vehículos que anunciaban habían sido manipulados.
CON LA ITV PASADA
Para dar una total apariencia de normalidad, los encartados en la operación adquirían los vehículos en subastas o procedentes de renting los cuales tenían una gran cantidad de kilómetros (entre 180.000 y 370.000 kilómetros) y una antigüedad menor a cuatro años. A posteriori procedían a modificar los odómetros de los vehículos para dejarlos entre 50.000 y 70.000 kilómetros.
Llegando en muchos casos a pasar ellos mismos la primera ITV al vehículo con la finalidad de tener un documento que acreditara el kilometraje y así poder obtener un mayor beneficio económico.
A partir de este momento los ponían a la venta, anunciándose en determinados casos incluso como si fueran particulares, para aumentar la sensación veracidad del kilometraje ya manipulado.
En el marco de esta operación, han resultado inculpadas un total de seis personas, todas ellas de origen español a quienes se les imputan diversos delitos de estafa.
La Guardia Civil estima que pudieran haber rebajado más de 10.000.000 de kilómetros, y está constatado que han vendido vehículos por un valor que supera el millón de euros.
