El Trono del Cristo, que rememora la Sentencia de Jesús por Pilatos, es de caoba con orfebreria dorada obra del artista Cristobal Martos y el pasado año estrenó con brillantez la restauración de los apóstoles de las hornacinas del Trono, así como la Camisola que vistió el Cristo.
En cuanto a la Virgen del Calvario, que debe su advocación a la zona donde tiene su sede parroquial, lució por segundo año la túnica del Niño Jesús que lleva a los pies el Trono -imagen ésta, como la propia Virgen, del imaginero José Dueñas- que fue confeccionada por la hermana de la Cofradía, Ana Tadeo.
La procesión partió a las ocho de la tarde de la Parroquia Cristo Resucitado, con la Cruz Guía a la cabeza, acompañada por dos faroles y cuatro ciriales con dalmáticas, a la que seguirá la Banda Municipal de Torremolinos y una sección de nazarenos del Cristo, vestidos con túnica negra -confeccionadas por hermanas de la Cofradía- y capirotes rojos, con cirios blancos, así como capa de color rojo para los mandos de Sección.
La Sección de nazarenos del Cristo también procesionó con su Estandarte y tras la representación eclesiástica, inundó de sentimiento cofrade cada rincón del itinerario el Trono del Cristo, adornado con lirios morados y portado por 120 hermanos con túnicas rojas, tras el cual desfilaba la Banda de Cornetas y Tambores de Campillos.
Por su parte, la Sección de la Virgen, cuyo Trono, adornado con lilium y rosas blancas, estaba precedido por el Guión, que estrenó bordado, flanqueado por dos Faroles y el Estandarte de la Virgen acompañado por dos ciriales, así como los nazarenos con túnica blanca y capirote verde, mientras que los mandos estrenaron este año nuevas capas.
En la procesión participaron también los párrocos de las distintas iglesias del municipio, quienes acompañaban al director espiritual de la Cofradía, José Pulido, Párroco de Cristo Resucitado. Además, en el desfile procesional no faltaron tampoco las representaciones de las hermandades del Carmen, San Miguel, San Juan y de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús y la Virgen de los Dolores, así como la representación de la Corporación Municipal, presidida por el alcalde, Pedro Fernández Montes, acompañada por miembros de la Policía Local con uniforme de gala y seguida también por los representantes de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, Policía Local y Cuerpo de Bomberos de Torremolinos.
La Junta de Gobierno de la Cofradía desfiló delante de la Imagen de Nuestra Señora del Calvario en sus Misterios Dolorosos, Trono de plata adquirido por la Cofradía y realizado en los talleres de Cristobal Martos, que fue portado por casi un centenar de hermanos de la Cofradía vestidos con túnicas de color verde y acompañados por la Banda de Gilena (Sevilla) cerrando el cortejo.
Como en años precedentes, el momento del encierro en El Calvario fue especialmente emotivo y multitudinario, aunque la masiva presencia de personas durante todo el recorrido rubricó un año más la consolidación de esta Cofradía cuya labor da categoría y brillantez al Martes Santo torremolinense.
