Al menos 95 personas han muerto en los bombardeos aéreos llevados a cabo por la aviación del régimen de Bashar al Assad en las últimas horas contra Raqqa, principal bastión de Estado Islámico en Siria, según el último balance ofrecido este miércoles por el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos.
El organismo, que ha tachado de "masacre" lo ocurrido, ha advertido de que el balance de víctimas mortales aumentará ya que hay decenas de heridos de gravedad.
Según ha informado el Observatorio, con sede en Londres y una amplia red de informantes sobre el terreno, ha podido documentar los nombres de 52 de los fallecidos, entre los que hay tres mujeres y cuatro niños.
La aviación siria ha efectuado diez bombardeos sobre la zona industrial, un popular mercado cercano al museo, la mezquita Al Henni y la estación de autobuses de Raqqa, según el Observatorio.
Un grupo de activistas dentro de la ciudad, en manos de Estado Islámico desde marzo de 2013, han asegurado en su web que habría ya 115 muertos y más de 100 heridos, lo que supone el mayor número de víctimas hasta la fecha en Raqqa en un bombardeo aéreo. Las bombas han destruido 25 viviendas y más de 40 tiendas, así como el minarete de la mezquita Al Henni, que se vino abajo tras el ataque.