Los cuatro detenidos por la agresión a un policía local de Puerto Serrano han permanecido esta mañana en los calabozos de la Policía Local de Arcos a la espera de su traslado a los juzgados. Estos traslados se han llevado a cabo bajo unas fortísimas medidas de seguridad, pues tanto la Jefatura de la Policía Local arcense como el entorno de los juzgados han permanecido custodiados de forma extraordinaria por guardias civiles. Todo ello ante el temor de que otras personas pudieran interferir en el proceso judicial abierto contra los presuntos agresores del policía de Puerto Serrano que sigue ingresado en el hospital de Jerez recuperándose de las graves lesiones que le ocasionaron la noche del pasado sábado.
Los cuatro detenidos, miembros todos de la familia conocida en Puerto Serrano como los Cachimba, prestarían declaración hoy mismo en los juzgados a la espera de que el juez los envíe con toda probabilidad a un centro penitenciario a la espera del juicio. En este sentido, los calabozos de Arcos tienen un carácter provisional y suelen utilizarse para custodiar al autor de un delito grave mientras espera la decisión judicial.
La imagen de la Jefatura de la Policía Local ha sido bien distinta a la de todos los días, con más agentes de lo normal, tanto policías como guardias civiles, y más vehículos de seguridad, algo que lógicamente ha despertado la curiosidad tanto de los trabajadores del Ayuntamiento contiguo a la Jefatura como de los vecinos de Arcos que paseaban por la avenida Miguel Mancheño esta mañana.