El tiempo en: Cádiz

Almería

Detenido un interno fugado de Sevilla II disfrazado de anciano

Un agente, fuera de servicio, reconoció a B.J.E.M., de 38 años, pese al disfráz

Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai

La Guardia Civil ha detenido en Huércal-Overa (Almería) a un interno fugado del centro penitenciario de Sevilla II y sobre el que pesaba tres requisitorias de un juzgado de la capital almeriense y dos juzgados sevillanos.

   El arrestado, con más de 40 detenciones por delitos contra el patrimonio, amenazas y contra la seguridad vial, fue localizado por un agente fuera de servicio pese a que, para evitar ser detectado, salía a la calle "aprovechando la noche" e, incluso, "fingiendo ser una persona mayor, caminando agachado y con un bastón".

   La operación que permitió la captura de B.J.E.M., de 38 años, se produjo el día 22 cuando este agente fuera de servicio, que sabía de su situación legal, tuvo conocimiento de que estaba en el municipio de Huércal Overa, según ha informado la Comandancia.

   El guardia civil decidió entonces trasladarse a la zona en su vehículo particular y, tras varias gestiones, logró localizarlo caminando por la calle entre "grandes medidas de seguridad, intentando ocultar su rostro y pasando fuera de los rangos de luz del alumbrado público."

   Tras reconocerlo como B.J.E M., el agente comenzó a seguirlo de manera cautelosa, mientras pasaba aviso a las dotaciones de la Guardia Civil en servicio, hasta que accedió a un establecimiento público.

   El dispositivo fraguó poco después y se saldó con su arresto y puesta a disposición del Juzgado de Instrucción 1 de Huércal-Overa, cuyo titular ordenó el ingreso el prisión.

   B.J.E.M. cuenta con dos órdenes de detención e ingreso en prisión, emitidas por Juzgados de Sevilla y Almería, así como otra orden de detención y personación, de un Juzgado de Morón de la Frontera (Sevilla). Además no se personó en el Centro Penitenciario de Sevilla II tras un permiso penitenciario del pasado mes de octubre de 2014, siendo reincidente en este tipo de actos.

   La Guardia Civil ha destacado lo complicado de la detención ya que se desplazaba por las noches por zonas oscuras, con el rostro oculto e incluso se vestía de persona mayor, para lo que se valía de un abrigo, un gorro, y un bastón que usaba para caminar encorvado.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN