El Pleno extraordinario que ha servido para aprobar de forma definitiva los presupuestos municipales para 2015, que ascienden a 909,2 millones, ha sido aprovechado por el alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, para defender el descenso del pago medio a los proveedores de los 80 días de antes a los 9 de media que confirman los datos de intervención en el mes de diciembre pasado.
El alcalde ha asegurado que su mandato ha estado marcado por tres conceptos, la responsabilidad, la coherencia y el compromiso. Sobre el primero de ellos, ha destacado que son cuentas aprobadas en tiempo y forma y con cifras rigurosas y realistas, mientras que sobre la coherencia, ha afirmado que han adoptado las decisiones “por el bien de los ciudadanos”, aunque ha admitido que se han podido equivocar y que se han visto obligados a modificar sus planteamientos debido a las circunstancias de cada momento.
Sobre el compromiso, ha hablado de la reducción de la dueda en un 35%, el saneamiento de las cuentas, el mantenimiento de los servicios públicos o el Plan Especial de Apoyo Social, al que han destinado siete millones. Y ha hecho hincapié en que el Ayuntamiento paga a nueve días frente a los 80 de antes.
Esta media municipal recoge que mientras algunas entidades pagan antes del plazo mínimo (Fibes, Turismo de Sevilla o el Alcázar), otras tardan más, como Urbanismo (57 días), Lipasam (30,7) o Tussam (20,51).
La oposición no ha visto tan positivo este balance. Juan Espadas (PSOE) le ha acusado de centrarse en la mera “contabilidad” y abandonar “los barrios” y las políticas sociales, mientras que Josefa Medrano (IU) ha criticado su “total inacción” para solucionar asuntos como el paro o la vivienda.
