Un contrafuego de más de 100 metros de anchura en el flanco sureste del incendio de Quesada busca frenar su avance, sobre todo, según ha explicado el consejero de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, José Fiscal, que no llegue a la vegetación de ribera del Guadiana Menor y que pueda saltar su cauce ante la proximidad del Parque Natural de Cazorla, Segura y Las Villas.
José Fiscal, que ha supervisado los trabajos de extinción desde el punto de mando avanzado del dispositivo del Infoca ubicado en la Estación de Huesa y donde ha coincidido con el delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, ha reconocido que "está siendo muy difícil" poner coto a este incendio que, según sus palabras, "afecte a bastantes más" de las 2.000 hectáreas que se están dando como referencia.
El contrafuego, según ha explicado el consejero, es una quema controlada de una amplia zona para que "cuando llegue el frente principal el fuego pueda ser abortado porque el terreno ya está quemado". En este sentido, Fiscal ha indicado que se trata de "una técnica arriesgada", pero son "expertos y profesionales" la que la están llevando, y por el momento en lo que están puestas todas las miras confiando en que "surta efecto y se pueda parar el avance".
También en esta línea, el consejero ha hecho "un llamamiento a la tranquilidad y confianza" de la población puesto que "se está haciendo todo lo que técnicamente y humanamente es posible" para sofocar este incendio que comenzó en la tarde del domingo, 5 de julio, cuando un rayo de una tormenta seca cayó sobre el paraje conocido como La Cruz del Muchacho.
El otro flanco activo del incendio se sitúa en el sur, próximo a la Estación de Huesa y es el que avance hacia el límite de la provincia de Granada. Es en este frente donde parte de los efectos de la Unidad Militar de Emergencia están trabajando en labores de remate, liquidación y vigilancia.
En total, más de 500 personas y 17 medios aéreos, ha dicho el consejero, trabajan en la extinción de este fuego que tiene como protagonistas las condiciones meteorológicas adversas con elevadas temperaturas, vientos poco favorables y una humedad relativa del aire que ha llegado al 9 por ciento. A todo ello se le suma lo abrupto del terreno, una combinación que según Fiscal "lo está haciendo todo muy difícil".
Se mantiene también el desalojo preventivo de 29 habitantes de la pedanía de Ceal, perteneciente a Huesa, así como de varias cortijadas de Chillal y Cortijos Nuevos, ante el riesgo de que un cambio en la dirección del viento los deje sumidos en una cortina de humo.
Al igual que Antonio Sanz, el consejero de Medio Ambiente ha destacado la colaboración institucional y el "gran esfuerzo" que se está realizando como medios de las dos administraciones para sofocar este incendio declarado en una zona de alto valor ecológico, en la que además de masa forestal se han visto perjudicados en los primeros días cultivos de cereal y plantaciones de olivar.