Arrancó el Concurso en el Falla. Se acabaron las esperas, las colas y las primeras coplas al fin llegaron a las tablas del Gran Teatro. Una sesión que respondió a las expectativas (escasas) y que salvo la comparsa de Antonio Rivas y Pepito Martínez, ‘Un país llamado Cádiz’, fue de más a menos.
Los nervios iniciales de la inauguruación de preliminares se fueron templando ante lo que estaba por llegar. La oferta nocturna encontró en la comparsa gaditana la mejor definición de ello. Ajustada un año más, quizás como suele ser, el grupo y la música destacan sobre manera al resto.
Afinación perfecta y variedad vocal de sus componentes. Lores, Maday o Juaqui supieron defender un año más una de las comparsas esperadas. Sin duda alguna fue lo único a destacar lamentablemente.
El coro mixto ‘Monopoly’ mostró su crecimiento respecto al año pasado con un tipo ajustado a unos millonarios derrochadores de dinero. Derrocharon ilusión y ganas. Entre arrobas y arrobas, los corsarios de Ramón Peñalver con ‘Los piratas informáticos’ también ayudaron a salvar la primera parte, que se mostró menos incompleta en una primera función que no terminó de enganchar y que sirvió para romper el hielo de las preliminares.