El Gobierno panameño informó hoy de que ejecutará "con la mayor rapidez posible" el proceso de evaluación de sus sistemas financiero y fiscal, el pilar de la "estrategia" para hacer frente a "Los Papeles de Panamá", el escándalo por el que países como Francia le han vuelto a señalar como paraíso fiscal.
La vicepresidenta y canciller panameña, Isabel De Saint Malo, está encargada de la creación de un comité de expertos locales e internacionales que tendrá la labor de "valorar las prácticas" en materia financiera y fiscal, algo que, dijo hoy la alta funcionaria, será su "prioridad en las próximas semanas, meses".
"Con este comité vamos a valorar nuestras prácticas y asegurarnos que estamos cumpliendo con esas normas" que el país ha aprobado para hacer más "transparente" su importante centro financiero internacional, un sector que junto al de la logística y el turismo fundamentan la pujante economía de Panamá, dijo la canciller.
Fue el propio presidente panameño, Juan Carlos Varela, el que anunció la creación del comité, anoche, durante una alocución nacional en la que pidió respeto para su país y que se usen las vías diplomáticas para abordar cualquier tema derivado de la filtración masiva de documentos "mal llamada Papeles de Panamá".
"La diplomacia no trabaja con puñetes, trabaja con firmeza pero a a través del diálogo, de las relaciones diplomáticas, y de esa manera es que vamos a salir a delante y dar los pasos que tengamos que dar" para "limpiar la imagen de Panamá", declaró De Saint Malo este miércoles.
La filtración masiva de los documentos del bufete de abogado Mossack Fonseca, que ha dejado al descubierto miles de empresas y activos opacos de personalidades de todo el mundo, ha revelado también un "problema global", reiteró la vicepresidenta y canciller.
La misma Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) lo ha "reconocido así", de allí que exista "toda una corriente mundial por transparentar los sistemas" financieros y fiscales, añadió.
De la OCDE ha venido una de las reacciones más virulentas contra Panamá tras la filtración de los documentos de Mossack Fonseca. El secretario general de la organización, Ángel Gurría, calificó al país centroamericano como "el último gran reducto que sigue permitiendo la ocultación de fondos en paraísos fiscales"
Francia, a través de su ministro de Finanzas, Michel Sapin, anunció el lunes que incluirá nuevamente a Panamá en su lista de paraísos fiscales, y ayer pidió una reunión de los países de la OCDE para que hagan lo mismo.
"Este es un problema global y el compromiso del Gobierno de Panamá es coherente con el esfuerzo global por la transparencia en los sistemas financieros. Cuando lees la información (de la filtración) se habla de una firma de abogados panameña, pero se habla de bancos de 21 jurisdicciones fuera de Panamá, de sociedades registradas en otras jurisdicciones", resaltó De Saint Malo.
El escándalo y sus consecuencias centran ahora la atención en Panamá, que está sometida a una presión internacional para que ceda en algunas posturas que podrían afectar al sistema financiero, dijo a Acan-Efe este miércoles la ex fiscal general y actual diputada de la Asamblea Nacional (AN), Ana Matilde Gómez.
"Lo que nos hace atractivos es lo que nos hace vulnerables", dijo Gómez, en referencia los servicios financieros e internacionales panameños, y valoró como positiva la iniciativa oficial de revisarlos porque son dinámicos y cambiantes.
A raíz de la filtración, la mayor de la historia periodística con 11,5 millones de documentos, las autoridades de varios países, incluido Panamá, han anunciado investigaciones para determinar si esas empresas "offshore", cuya constitución es legal, han servido para ocultar dinero, evadir impuestos o blanquear activos.
"Panamá tiene la obligación de cooperar con los países que en algún momento tengan investigaciones de corrupción que hayan presentado en nuestros sistemas", dijo al respecto la ex fiscal general y diputada.
El Ministerio Público panameño anunció el pasado lunes que pedirá ayuda internacional para el proceso penal que adelanta tras la filtración masiva de documentos.