El Ayuntamiento dará opción a los trabajadores municipales para que puedan elegir el horario en el que desarrollar sus funciones entre las 7.30 y las seis de la tarde “para adaptar la jornada laboral a la vida familiar”. Así lo anunció ayer la delegada de Empleo y Recursos Humanos, Laura Álvarez, que aboga por “intentar” de este modo que en el Ayuntamiento haya un horario “europeo” para “facilitar en lo máximo la posibilidad de conciliación de los trabajadores siempre y cuando ofertemos servicios públicos de calidad”.
Como ella misma explicó, se trata de “adaptar” su jornada laboral a su vida familiar, unas circunstancias muy complejas en el ámbito de las empresas privadas, como dijo, pero que no tienen por qué serlo en la Administración local a partir de ahora. De aplicarse este modelo de horario, se daría “flexibilidad” al trabajador o trabajadora a “llevar a sus hijos al colegio a las nueve”, añadió, o recogerlo a la hora que se tercie, entre otras obligaciones, que permitan equilibrar los quehaceres en el trabajo y en el hogar.
Lógicamente, nada es a cambio de nada, y esto atraería aparejado el cumplimiento de las 37 horas y media semanales “obligatorias por ley”, dos horas y media más que actualmente. Un caballo de batalla que el Ayuntamiento tiene aún que negociar con las secciones sindicales dentro de las medidas que contempla el nuevo Plan de Ajuste aprobado en Pleno hace 15 días para ahorrar hasta 8 millones de euros al año a partir de 2017 y reducir al 40% las productividades.
Por ello, tras el parón de la Feria del Caballo, Álvarez avanzó ayer que está previsto que “antes de que termine la semana” se convoque una nueva sesión de la Mesa de Negociación con los sindicatos para fijar el nuevo cuadro horario.
Tras los intentos fallidos hasta ahora y varios incidentes de por medio entre los sindicatos, la responsable municipal de Recursos y Empleo en el Ayuntamiento apela a la “sensatez”. “Espero que podamos sentarnos y entendernos porque tenemos mucho que negociar”, señala.
