El obispo de la Diócesis de Cádiz y Ceuta, Mons. Rafael Zornoza Boy, presidió en la Catedral de Cádiz el Solemne Pontifical con motivo del Corpus Christi. Ante una Catedral llena de fieles, en una ceremonia a la que asistieron distintas autoridades civiles y militares de la ciudad, el obispo diocesano aseguró que “el cuerpo de Cristo es un gran consuelo para el creyente y para el mundo. Jesús muestra que es el único que responde a las necesidades de los hombres sobreabundantemente”.
El cuerpo de Cristo es el gran consuelo para el creyente y para el mundoAsí, monseñor Zornoza afirmó, en esta jornada en la que también se celebra el Día de la Caridad, que “el cuerpo y la sangre de Cristo es una llamada a la fe porque nos invita a contemplar al Señor presente en la Eucaristía, y una llamada a la caridad. Jesús sale de nuevo a nuestro encuentro con su amor inagotable y misericordioso, por encima de nuestras miserias”. Refiriéndose a la procesión del Corpus Christi, el prelado expresó que “nuestras vistosas Custodias volverán después de la procesión al silencio de la iglesia, pero los cristianos, por el contrario, como Custodias de carne y hueso, lejos de dormitar, debemos seguir llevando a Cristo, pregonándolo a los cuatro vientos todos los días del año. La procesión quiere ser una bendición grande y pública para nuestra ciudad”.
Una vez finalizado el Solemne Pontifical tuvo lugar la Solemne Procesión del Santísimo Corpus Christi en la Custodia de “El Cogollo”, que recorrió la Plaza de la Catedral, Santiago, Plaza Candelaria, Cardenal Zapata, Plaza San Agustín, San Francisco, Nueva, Plaza San Juan de Dios, Pelota y regreso a la Plaza de la Catedral. En ella participaron distintos colectivos de la
Iglesia gaditana, al igual que los niños de Primera Comunión, que celebraron la Eucaristía en la Iglesia de Santiago.
El próximo domingo, 5 de junio, a las 12.00 horas, se celebrará la Eucaristía y la procesión de la Octava de Corpus por las naves de la Catedral.
