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Sevilla

Abogados Cristianos llevarán a Europa la procesión del "coño insumiso"

Los Abogados Cristianos han hoy que recurrirán el archivo, incluso hasta los tribunales europeos, de la causa por la procesión del llamado "coño insumiso"

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  • La manifestación -

Los Abogados Cristianos han anunciado hoy que recurrirán el archivo, incluso hasta los tribunales europeos, de la causa abierta por la manifestación del 1 de mayo de 2014 en la que unas mujeres portaron una gran vagina de dos metros como si fuera una procesión, conocida como la del "coño insumiso".

Polonia Castellano, presidenta de la asociación, que presentó la denuncia, ha asegurado a Efe que seguramente presenten un recurso de reforma y apelación al archivo decretado por la juez de instrucción 10 de Sevilla, Pilar Ordóñez.

También están planteándose la inhibición de la juez ante las "presiones" que recibió el Ayuntamiento de Sevilla, que le remitió la resolución adoptada en pleno por PSOE, IU y Podemos en la que pedían el archivo de la causa, por lo que la magistrada pidió el amparo del Consejo General del Poder Judicial al considerar que ese acto "perturbaba" su independencia.

Los Abogados Cristianos califican como la "procesión del santo coño insumiso" la que protagonizaron "anarquistas y feministas" el 1 de marzo de 2014, cinco de los cuales fueron imputados en la causa por la presunta comisión de delitos contra los sentimientos religiosos, una causa que la juez archivó esta semana porque no aprecia delito alguno.

"Durante la marcha, anarquistas y feministas radicales realizaron diferentes vejaciones de la fe cristiana portando una vagina de plástico vestida de virgen María, haciendo escarnio de oraciones como el Padrenuestro, el Ave María o el Credo y profiriendo amenazas del tipo "hay que quemar la Conferencia Episcopal"", aseguran los denunciantes.

"Vamos a lucharlo hasta los tribunales de Estrasburgo si fuese necesario, porque la libertad religiosa es un derecho humano que debe ser respetado", sostiene Castellanos.

La juez Ordóñez defiende en su auto que "el no creer en los dogmas de una religión y manifestarlo públicamente entra dentro de la libertad de expresión", pero ello no debería justificar "las vejaciones que durante la marcha realizaron los participantes", según los denunciantes.

"¿Por qué la juez no dice ni una sola palabra del escarnio que se hace de la religión modificando sus oraciones cambiando el Ave María y el Credo por unas pseudo-oraciones vejatorias?", pregunta Castellanos.

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