Tras múltiples "vicisitudes y problemas", según ha reconocido el alcalde de Sevilla, Juan Espadas (PSOE), la construcción de la comisaría de Policía Local de Bellavista ha finalizado con un plazo de ejecución "mucho más" prolongado de lo previsto. El edificio, ya rematado y listo para entrar en servicio, funcionará con agentes actualmente asignados a la comisaría de la avenida de la Paz, toda vez que también acogerá las instalaciones de la sede del distrito Bellavista-La Palmera.
La construcción de esta comisaría fue planificada y presupuestada en el último tramo de la etapa del alcalde socialista Alfredo Sánchez Monteseirín. Los trabajos no arrancaron hasta 2014, durante el mandato del popular Juan Ignacio Zoido, tras ser adjudicados a la empresa Sando por 1.154.206 euros, lo que constituía una baja del 27 por ciento respecto al precio de licitación.
No obstante, la ejecución del proyecto quedó paralizada en 2015, cuando alcanzaba un grado de ejecución del 55 por ciento, al surgir divergencias técnicas y económicas entre el Ayuntamiento como promotor del proyecto, y Sando como entidad ejecutora del mismo. Según explicaba en su momento el actual alcalde, Juan Espadas (PSOE), "la obra comenzó y tuvo un parón como consecuencia de un modificado del proyecto y las distintas visiones de cómo había que arreglar este modificado, entre la dirección de la obra, los responsables del Ayuntamiento y la Intervención".
MÁS DINERO
Para el reinicio de las obras, finalmente, fue aprobada una modificación del proyecto por valor de 34.606 euros, IVA incluido, tras lo cual allá por junio de 2016 se levantó la suspensión de los trabajos y se concedió una ampliación de plazos a la empresa de 2,5 meses, periodo que sumado al tiempo que restaba a la adjudicataria del plazo inicial de ejecución de las obras cuando se produjo la suspensión, situaba un periodo de unos cinco meses, para la finalización de las obras.
Pero desde entonces hasta ahora, el proyecto ha necesitado varias prórrogas en lo que respecta al plazo estipulado para su conclusión, según la documentación recogido por Europa Press.
Ya este viernes, el alcalde ha visitado el edificio, con motivo de la esperada conclusión de la obra civil. Espadas, en ese sentido, ha admitido que el proyecto ha sufrido "vicisitudes y muchas dificultades", con lo que la construcción "ha durado mucho más de lo previsto", rozando su coste final los 1,2 millones de euros.
En cualquier caso, ha defendido que el Gobierno local socialista ha logrado "superar" los contratiempos surgidos en este proyecto, y las obras están al fin "terminadas", para que comience "el traslado" de un número de efectivos desde la comisaría de Policía Local de la avenida de la Paz, hasta la nueva comisaría de Bellavista. En ese sentido, el alcalde ha expuesto que con la nueva comisaría, se aplica el concepto de la "policía de proximidad".
TAMBIÉN SEDE DEL DISTRITO
Además, Espadas ha anunciado que dado que el Ayuntamiento no encontraba "un lugar idóneo" en el que reubicar las instalaciones de la sede del distrito Bellavista-La Palmera, que llevan "años" en unos módulos prefabricados, se ha decidido que dichas instalaciones, con sus funcionarios, sean trasladadas al edificio de la nueva comisaría.
La idea, según ha expuesto, es que el nuevo inmueble "compatibilice" los servicios de Policía Local y de la sede del distrito. Así las cosas, la plata baja estará principalmente destinada a las dependencias del distrito Bellavista-La Palmera, mientras las plantas superiores acogerán las instalaciones de la Policía Local.
Aunque Espadas defiende que esta "compatiblidad" en los usos del edificio "no generará grandes molestias" para ninguno de los citados servicios, ha expuesto que las dependencias del distrito serían nuevamente trasladadas, en el caso de que fuese localizado "un lugar mejor". En cualquier caso, ha expuesto que el Ayuntamiento trabaja ya tanto en la asignación de los agentes que prestarán servicio en la nueva comisaría, como en la reubicación de las instalaciones del distrito. "Estamos resolviendo problemas enquistados", se ha ufanado.