El Grupo Independiente Liberal de Andalucía (GIL-A) manifestó su apoyo al colectivo de los docentes interinos andaluces. Desde el partido, se considera "inadmisible" que trabajadores que llevan años contratados de forma precaria, lejos de la familia, haciendo muchos kilómetros diarios o pagando dos alquileres, estudiando un año para opositar y el siguiente para mejorar el baremo con máster, idiomas, etc., puedan quedarse en la calle por un sistema de acceso injusto que no valora en su justa medida la experiencia laboral.
"Los interinos han demostrado sobradamente su capacidad para realizar la labor docente, pues realizan el mismo trabajo que un funcionario de carrera", comentaron miembros del partido. "Además, la mayoría ha aprobado las oposiciones más de una vez, no habiendo conseguido su plaza por la escasez de la oferta de la Junta de Andalucía o por carecer, en ese momento, de los suficientes méritos", continuaron.
Para Daniel Ripoll, presidente local del GIL-A en La Línea de la Concepción, "la situación que están viviendo estas mujeres y hombres es lamentable, pues además de verse en la obligación de demostrar sus conocimientos cada dos años, dependiendo su futuro y el de su familia de una prueba memorística que en definitiva no demuestra su buen hacer docente, son de los pocos trabajadores que están dentro de una empresa donde la experiencia laboral no les garantiza su puesto de trabajo".
"Desde el GIL-A, solicitamos a la Presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, y a la Consejería de Educación, que ofrezca a los interinos docentes andaluces una vía justa de acceso al funcionariado, donde ningún trabajador que actualmente presta sus servicios se quede fuera", concluyó Ripoll.
