La familia rociera ha puesto este mediodía punto y final a la romería de Pentecostés de 2018 con un "hasta luego", sabedora de que, en esta ocasión no habrá de esperar un año para volver a tener a la Virgen del Rocío de frente, ya que habrá un nuevo encuentro en no más de cuatro meses.
Y es que el calendario rociero marca este año también de rojo el 8 de septiembre, jornada en la que se conmemorará el primer centenario de la Bula Pontificia en la que se ordenó su coronación canónica, que tuvo lugar el 9 de junio de 1919.
Pero esto no acaba aquí. El 2019 también brindará a los rocieros la posibilidad de ver dos veces procesionar a la imagen a la que profesan su fe, pues además de durante la romería, que será en junio, volverá a dejar su Santuario en agosto cuando tenga lugar la conocida como 'Venida', un hecho que se produce cada siete años y que la lleva hasta Almonte durante nueve meses.
Estos hechos, que han motivado la concesión del Año Jubilar Mariano al Rocío por parte del Vaticano, hacen que para muchos devotos la nostalgia y añoranza por poner fin a la romería, ese momento agridulce que se vive el Lunes de Pentecostés cuando tras el momento más anhelado hay que poner, algunos casi sin apenas descanso, rumbo a los lugares de origen, sea más llevadero.
Todo ha acabado poco antes del mediodía, cuando a las 11.30 horas la Virgen del Rocío ha alcanzado la 'Concha Peregrina' que corona su Santuario y se ha puesto punto y final a una procesión de alrededor de ocho horas y media en la que ha estado muy presente el 25 aniversario de la visita del papa Juan Pablo II al Rocío al recordarla el propio exorno floral de la Virgen, hibuscus rosa sinensis, en color blanco y amarillo, los colores del Vaticano.
Ha sido una procesión que podría calificarse de inédita por lo ocurrido desde el inicio, en lo que ha tenido mucho que ver esa modificación que se le ha hecho al paso procesional.
La expectación y el ansia de los jóvenes almonteños por ser los primeros en hacerse con él llevó a que no se esperara a la llegada del Simpecado de la Matriz del rezo del Santo Rosario para llevar a cabo el conocido como "salto de la reja", un momento que ha ocurrido a las 2.34 horas, casi una hora antes que en 2016.
Pese a esto sí que han tenido la contención de esperar la llegada de la insignia para mover a la Blanca Paloma, para bajarla de su prebisterio y dar inicio a un paseo que ha ganado, con ese nuevo paso, en agilidad y ha dotado a la imagen de más verticalidad.
Ese recorrido ha vuelto a significar un verdadero acto de cortesía de la Virgen para con sus hermandades filiales y todos sus fieles, a los que durante su salida por las calles de la aldea les ha agradecido un año más su presencia.
A lo largo del día de hoy, serán 28 las hermandades que abandonen la aldea, algunas de las cuales verán modificados su recorridos por la afección que las lluvias caídas en las últimas horas han tenido sobre el Camino de Hinojos.
De esta forma, las filiales de Sanlúcar La Mayor y Málaga La Real salen hoy de El Rocío por el Camino de los Tarajales por motivos de seguridad ya que el itinerario habitual de estas filiales no está transitable a esta hora.
Con esta decisión se evita el paso por el tramo del Camino de Hinojos que discurre desde el Puente del Rey hasta el Pino de los Mil Duros; las otras 26 hermandades que hoy abandonan la aldea por el Camino de Sevilla lo harán sin novedad por el trayecto habitual.
En total hoy se marchan 79 corporaciones, fundamentalmente de puntos de las provincias de Sevilla y Cádiz; de ellas 46 hasta regresan en autobuses.