El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ha asegurado este lunes que el líder de Podemos, Pablo Iglesias, dio por rotas las negociaciones con el PSOE para la investidura convocando una consulta a las bases "trucada" y que, a su juicio, es una "mascarada" que busca justificar una negativa a su investidura.
"Conocí por los medios una consulta que a todas luces supone la ruptura por parte de Iglesias de las negociaciones con el PSOE", ha asegurado en una entrevista en la Cadena SER, recogida por Europa Press, admitiendo su "frustración" con la situación.
"Las dio por rotas Iglesias. La consecuencia es la que empezamos a intuir: Iglesias está usando esta consulta trucada para justificar una votación contraria a mi investidura, coincidiendo con la ultraderecha", ha añadido sobré el devenir de las negociaciones entre PSOE y Podemos.
Ante la investidura de la próxima semana, el presidente en funciones cree que Podemos tendrá que decidir que vota ante un gobierno progresista y a PP y Ciudadanos le ha reclamado que asuma su responsabilidad para que haya un Ejecutivo ya en julio.
Preguntado si volverá a llamar al líder de Podemos, Sánchez ha insistido en que ahora Iglesias tendrá que responder "si va a votar que 'no' junto a la ultraderecha". No obstante, ha dicho que volverá a llamar a todos los líderes políticos para instarles a su responsabilidad de cara a la investidura.
Igualmente, ha avisado que su "candidatura decae" tras el mes de julio, y que las ofertas que le hizo a Podemos para una investidura cayeron cuando Iglesias presentó su consulta "con un manotazo". "Aquí no hay segundas partes", ha recalcado.
Después de que Podemos activara el viernes una consulta a las bases para que decidan si deben apoyar la investidura de Pedro Sánchez, previo pacto para un Gobierno de coalición, Sánchez ha respondido que se trata de una consulta que "no recoge la realidad" y la ve una "mascarada" de Iglesias, al que acusa de tener una posición "maximalista".
"O se hace lo que él dice o nos encontraremos un voto negativo", ha dicho sobre Iglesias, acusándole de usar esta herramienta de forma "torticera" y "sigue la pauta" de 2016, cuando Podemos rechazó la investidura de Sánchez tras un pacto con Ciudadanos.
Sánchez lamenta que todavía no se han sentado con Podemos para hablar de programa ni de equipos y por lo tanto no procede preguntar a las bases sobre un acuerdo que no se ha cerrado.
IGLESIAS QUIERE IMPONER NOMBRES
Sobre la intención de Iglesias de entrar en el Ejecutivo, el líder del PSOE ha indicado que él no es "una persona de vetos", pero no aceptará "imposiciones". "Una de las tareas del presidente es hacer su equipo. Me pueden proponer nombres pero tengo que tener la capacidad de poder decidir sobre las personas que van a incorporarse a mi Consejo de Ministros", ha subrayado.
Sánchez ha admitido sus "dudas" con respecto a que Iglesias forme parte del gabinete. "Los dos somos líderes de dos formaciones con coincidencias en política sociales, pero con enormes discrepancias y diferencias sobre temas de enorme vigencia como la cuestión catalana", ha explicado.
Así, ha indicado que ante una situación en la que la Generalitat no renuncia a la unilateralidad para avanzar en la vía independentista, el Gobierno tiene que estar "preparado para cualquier eventualidad". "Eso exige de cohesión interna al máximo para afrontar un potencial desafío al Estado", ha apuntado.
A su juicio, es "evidente" que el independentismo continúa en esta estrategia, "quebrando la convivencia" en Cataluña y por ello, "el Estado tiene que actuar en caso de que vaya a más".
Por ello, entiende que estas diferencias se pueden "sortear" mediante la confección de un Gobierno de cooperación, con el partido 'morado' fuera del Ejecutivo.
Con todo, Sánchez ha señalado que "nunca" llegaron a hablar de nombres concretos y ha dicho que Iglesias no le explicitó que quisiera ocupar la Vicepresidencia del Gobierno.
OFERTA DE INCORPORAR A PERSONAS "CUALIFICADAS"
El jefe del Ejecutivo ha confirmado que ofreció al líder de Podemos la entrada de miembros de su partido "con perfil sectorial", poniendo en valor que haya ministros con alto nivel de "cualificación", como Teresa Ribera, titular de Transición Ecológica, o José Guirao en Cultura. "Es militante del PSOE pero no es conocido por eso, sino por ser reconocido por todo el mundo en el mundo de la cultura", ha señalado.
"Es la primera vez que se hace una oferta así, a un partido que representa la cuarta fuerza, y me dijo que no, la descalificó tachándola de idiotez", ha afirmado, recalcando que la oferta es "honesta" y responde a que tienen puntos en común con Podemos, pero también discrepancias.