El presidente del Gobierno en funciones y candidato a la investidura, Pedro Sánchez, ha afirmado este lunes que para superar las "tensiones territoriales", además de "la invocación de la ley y de la Constitución" será necesario "un proyecto colectivo de regeneración nacional, de progreso y de inspiración europeísta".
"La superación de nuestras tensiones territoriales no vendrá solamente de la invocación de la ley y de la Constitución y de su aplicación, sin duda alguna necesaria. Derivará de un proyecto colectivo de regeneración nacional, de progreso y de inspiración europeísta", ha dicho.
Sánchez ha aludido así, veladamente y sin mencionarlo, al desafío independentista en Cataluña, al cabo de casi media hora de discurso en la primera jornada de la sesión de investidura. Lo ha hecho justo después de enumerar los que considera seis grandes desafíos, el último de los cuales ha sido la apuesta por una UE unida y que no olvide sus valores.
En ese contexto, se ha preguntado "qué sentido tiene fomentar la desunión, la desagregación, la división dentro de España", y "levantar fronteras internas", cuando lo que hace falta es "más Unión Europea" y "derribar muchas fronteras externas". "Es ir contra la historia", ha advertido a los independentistas sin dirigirse expresamente a ellos.
Además de recalcar que los países europeos solo son "gigantes entre gigantes" si están juntos, pero "cuentan poco" por separado, ha señalado que la UE ha sido "el espacio en el que se han superado las rivalidades nacionalistas que llevaron a dos guerras devastadoras" y ello por la vía de "compartir soberanía, no cederla".
Con ese argumento, ha añadido que Europa "debe ser también el ámbito donde se superen las rivalidades dentro de los países". "El horizonte superador de nuestras propias tensiones internas", ha resumido.