Miguel Redondo Rosillo, Miguelón, como es conocido popularmente, ha pedido a los gestores del Centro Comercial de Bahía Sur y en concreto a la empresa que instalará los cines, que tenga en cuenta las necesidades de las personas en sillas de ruedas que hasta ahora tienen muy reducidas las posibilidades de ver cine en San Fernando.
En una carta remitida a este periódico, Miguelón dice que "no sé si se llevara a cabo el proyecto de tener salas de cines en dicho lugar, pero la verdad es que a mí me gustaría, como a más personas usuarias de en silla de ruedas".
Sin embargo, lo que sí pide Miguelón es que sus salas tengan acceso para silla de ruedas "tanto a media como a alta zona de butacas" para evitar los problemas que padecen las personas como Redondo Rosillo en los actuales Cines Plaza.
"Que no ocurra como en las tres únicas salas habilitadas de las diez salas que tiene el cine del centro de ocio, que podemos entrar en las tres salas, pero hay que joderse, porque se tiene que tener que ver la película en la primera fila de butacas, a tres metros de la pantalla y con la nuca dando en la espalda y saliendo al final de la película con dolor de cervicales, buscando a la vuelta de la calle la farmacia de Cándido, para comprar paracetamol, en vez de haber comprado palomitas", dice Miguelón.
Redondo Rosillo reconoce que "sólo fui tres veces y no voy más ni invitado. Una de ella fui hará nueve añosporque me ayudaron mis amigos a subirme a pulso y a mitad de la media sala. Nunca lo olvidaré".
Miguelón denuncia al falta de consideración de las empresas de todo tipo para con las personas que ussan sillas de ruedas, ya que lo mismo que ocurre en las salas de cines ocurre en los trenes, autobuses y autocares, ya con un solo habitáculo, se justifican y el lugar es ya accesible y ya cumplen las normas. Y si da el caso de que vamos más sillas de ruedas, que se fastidien que no puedan entrar, como dicen algunos".
Miguelón pide que sean más "concientes por favor y no nos justifiquemos con uno o dos asientos. Yo sugiero que todas sus salas tengan acceso y que veamos la película en la zona media y alta del cine, como las salas de cine que tenían antiguamente Bahía Sur en el año 2001 y 2002 a las cuales íbamos a menudo los compañeros del CRMF (Centro de Recuperación de Minusválidos Físicos). No cometan el fallo como en el centro Ábaco de San Fernando, por favor, que a día de hoy yo no puedo disfrutar de un estreno ni de ninguna película".
La carta de Miguel Redondo Rosillo termina dando las gracias por adelantado a los responsables de los nuevos cines del centro comercial Bahía Sur.
