La gota que colmó el vaso. La actuación de Valentín Pizarro Gómez y Mateu Lahoz, desde el VAR, en Anoeta hizo estallar al Cádiz y a su presidente.
Minutos después del pitido final ante la Real Sociedad, el club publicaba una carta escrita por Manuel Vizcaíno con el título “Luis, arregla el tema del VAR”, en la que el mandatario sevillano mostraba su disconformidad por las actuaciones del VAR en los partidos del Cádiz. En el escrito, Vizcaíno afirma que “no es de recibo que la tecnología siempre tenga un criterio contrario a nuestros intereses”.
Lo que enfada en el Cádiz es la diferencia de criterios en la toma de decisiones en jugadas similares, y en la que siempre los amarillos salen perjudicados
Un mal comienzo
Pronto comenzaron las decisiones que no beneficiaron a los gaditanos. En la jornada 1, en Carranza ante CA Osasuna, Díaz de Mera no señaló penalti por manos de David García al saque de un córner. La mano, igual que la de Negredo del pasado fin de semana, no fue señalada ni se revisó en el monitor del VAR.
Dos jornadas después, el submarino amarillo recibía al Sevilla FC en la tacita de plata. Los amarillos se adelantaban con gol de Salvi, De Jong empataba para los visitantes.
La polémica llegó en el minuto 90 cuando Jordán derribó a Lozano en el centro del campo haciéndole falta y servía un balón a Munir para que el marroquí adelantara a su equipo en el descuento.
Medié Jiménez no señaló la infracción del jugador sevillista, ni fue llamado por el VAR para ir a revisar la jugada al monitor.
Doble expulsión
Tres días después del encuentro ante el Sevilla FC, el Cádiz CF jugaba en San Mamés ante el Athletic Club de Bilbao. En tierras vascas, González Fuertes expulsó a Carlos Akapo y a Álvaro Negredo.
A pesar de que la doble amarilla al lateral era justa, la indignación cadista llegó por la segunda amarilla al ariete, ya que a pesar de recibir contacto claro dentro del área por parte del jugador del Athletic, el árbitro de la contienda vio ‘piscinazo’ de Negredo dentro del área, y dejó a los visitantes con nueve jugadores durante más de media hora.
El atropello a Perea
La jornada 5 marcó un antes y un después en el Cádiz CF y su entrenador, Álvaro Cervera, ya que las palabras del técnico a la conclusión del encuentro son las causantes de la sanción de cuatro partidos que tiene pendiente el entrenador cadista.
“No tiene más explicación que no quererlo pitar”, comentaba Cervera sobre la jugada en la que Alberto Perea fue derribado dentro del área por Foulquier en el minuto 84 de partido. Ni Alberola Rojas ni Cordero Vega, que estaba en el VAR, vieron penalti.
Esta acción, está recogida dentro de los cuatro casos en los que Velasco Carballo, presidente del Comité Técnico de Árbitros, en los que el VAR tendría que haber entrado.
Diferentes criterios con las manos
Sin embargo, lo que más molesta al cadismo es la diferencia de criterios en acciones idénticas y en las que siempre salió perjudicado el equipo.
En la jornada 11, en el Martínez Valero ante el Elche, Milla impacta el balón con la mano, en una jugada calcada a la de Negredo en Anoeta.
Del Cerro Grande no pitó penalti ni fue llamado por el VAR, mientras que Pizarro Gómez si fue llamado por Mateu Lahoz para revisar la jugada de Álvaro Negredo.
Esta acción en Anoeta llega justo una semana después de la clamorosa mano de Koke dentro del área, en la que Gil Manzano pitó penalti pero fue llamado por el VAR, y a pesar del impacto en el brazo del balón, cambió de opinión.