Así, la investigación se posiciona como un eje estratégico de cara al futuro, lo que se ve reflejado en la apuesta que el Gobierno andaluz realiza en los presupuestos para el próximo año, que destina a políticas de investigación científica y a la innovación 313,5 millones de euros, un incremento del 10 por ciento con respecto al ejercicio de este año y que continúa el progresivo esfuerzo que se ha ido aplicando en los últimos cuatro años, en los que las políticas de I+D+i se han visto incrementados en un 156,3 por ciento.
La apuesta por este Ecosistema de la Innovación tiene varios frentes en las políticas del Gobierno andaluz, que van desde la Orden de Incentivos al Sistema Andaluz de Innovación a la financiación de la Red de Espacios Tecnológicos de Andalucía (RETA), pasando por la apuesta por las infraestructuras científicas o la investigación y desarrollo de fibra oscura.
La orden de incentivos es el programa al que más presupuesto se destina, con 187 millones de euros (un 10 por ciento más) para apoyar proyectos de investigación de excelencia, grupos de investigación y equipamiento científico; seguido del apartado de las infraestructuras científicas, destinándose 78 millones a la creación de campus científicos tecnológicos estratégicos y a programas de consolidación de los existentes, aunque se presta también atención a los centros avanzados, como pueden ser los de NanoBiotecnología, del Mar, para el Bienestar Ciudadano (I2BC), Nuevas Tecnologías del Agua, Tecnologías Offshore o Alimentos Funcionales, entre otros.
También se ha previsto en los presupuestos de Innovación una partida específica, de 42 millones de euros, para la investigación y el desarrollo de las redes de telecomunicaciones, en las que se incluye la investigación en fibra oscura (8 millones de euros), además de la financiación, con 6,3 millones de euros, de la Red de Espacios Tecnológicos de Andalucía (RETA), un instrumento que persigue la conexión entre el tejido productivo andaluz y la investigación que se produce en Andalucía, favoreciendo la transferencia de tecnología.
Transferencia de conocimiento
De hecho, para consolidar ese Ecosistema de la Innovación es clave fomentar la transferencia de conocimiento al mundo empresarial, acercar la investigación al tejido productivo, por lo que la Consejería de Innovación destina 150 millones de euros a la red de parques científicos, parques científico-tecnológicos y centros tecnológicos de Andalucía, que está permitiendo el nacimiento y la consolidación de espacios de encuentro entre el tejido productivo y la I+D+i.
El esfuerzo por acercar la investigación al tejido productivo y porque éste sea cada vez más innovador encuentra su reflejo en los datos del Producto Interior Bruto (PIB) destinado a estas políticas. Así, Andalucía superó el 1 por ciento del PIB en inversión en I+D+i y se coloca entre las regiones más innovadoras del país.
Siguiendo el objetivo de ganar en competitividad y excelencia, talento y capacidad profesional, la formación se sitúa como otra de las claves del nuevo Ecosistema de la Innovación. De hecho, las universidades andaluzas contarán el próximo año con 1.332 millones, cifra que supone un ligero crecimiento (0,13 por ciento) respecto al ejercicio anterior y que cumple con los compromisos adquirido en el modelo de financiación universitaria, que ya alcanza el 1,03 por ciento del PIB de financiación pública, siendo el objetivo llegar al 1,05 por ciento en 2011.
Infraestructuras universitarias
Las infraestructuras también son centrales en esta apuesta por la formación de calidad, motivo por el que el presupuesto destina 125 millones en el marco del Plan Plurianual de Inversiones, para continuar y abordar proyectos como el del paraninfo y rectorado del a Universidad de Almería, la nueva Escuela Superior de Ingeniería en Cádiz, el Edificio de Ingenierías Leonardo Da Vinci de la Universidad de Córdoba, el Campus de las Ciencias de la Salud en Granada, la escuela Politécnica Superior en Huelva, el Campus Científico Tecnológico de Linares, la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Industriales y la Escuela Universitaria Politécnica en Málaga, el edificio mixto departamental en la Pablo Olavide y la Facultad de Derecho y Ciencias del Trabajo en la Universidad de Sevilla.
Además, para mejorar la gestión interna de las universidades se destinarán 14 millones de euros a la implantación del sistema Universidad Digital, introduciendo soluciones de administración electrónica, mientras que para se destinan 12 millones a la consolidación del actual proceso de adaptación al Espacio Europeo de Educación Superior (EEES), con proyectos tan significativos como el Campus Andaluz Virtual.
La formación de los jóvenes andaluces en el exterior es otro pilar en las cuentas de 2010, que se refuerza con 17 millones de euros para garantizar el complemento autonómico de las Becas Erasmus; con 14 millones para las nuevas convocatorias de las Becas Talentia, de postgrado en las mejores universidades del mundo; y con 2,5 millones para el Espacio Iberoamericano.
Para complementar la apuesta universitaria, se destinará 1 millón de euros al Espacio Virtual de Aprendizaje, que da respuesta a la formación permanente de la sociedad.
Premios de investigación
La labor investigadora también es reconocida a nivel institucional en nuestra comunidad. Así, los Premios Andalucía de Investigación tienen como objetivo reconocer y estimular la labor investigadora, intentando respaldar el trabajo que realizan tanto los investigadores como los organismos, instituciones o empresas que se hayan distinguido por su compromiso con el fomento de la investigación científica.
Así, este año se ha concedido el XVI Premio Andalucía de Investigación ‘Plácido Fernández Viagas’ al catedrático de la Universidad de Granada Juan Antonio Vera; mientras que el XV Premio Andalucía de Investigación ‘Ibn al Jatib’ ha sido para el catedrático José Antonio Domínguez de la Universidad de Sevilla. Además, el XIII Premio al ‘Fomento de la Investigación’ ha reconocido la labor de la empresa malagueña Airzone, y el VIII Premio Andalucía de Investigación ‘Tercer Milenio’ lo ha obtenido Raquel Barco, profesora de la Escuela Superior de Ingeniería de Telecomunicación.
En esta edición de los galardones también se ha convocado XIII Premio de Investigación Técnica y Científica ‘Maimónides’, que ha recaído en el profesor de la Universidad Pablo de Olavide José María Delgado, y el II Premio ‘Juan López de Peñalver’, que ha sido para Leopoldo García, catedrático de la Universidad de Sevilla. El próximo año, en lugar de estos dos se convocarán el III Premio ‘Antonio de Ulloa’ para las áreas de arquitectura e ingeniería y el III Premio ‘Columela’ para el área de ciencia de la vida.
