Tras dos años de paciente y delicada restauración, el Museo del Prado vuelve a exhibir las obras Adán y Eva, que, gracias al trabajo realizado sobre los soportes y las capas pictóricas, han recuperado el esplendor original con que las creó Alberto Durero.
Las obras Adan y Eva han recuperado todo el esplendor con el que las creó Durero, tras el laborioso trabajo de restauración realizado en los soportes de las tablas y en la capa pictórica.