La Policía Nacional ha detenido a seis personas y ha desmantelado dos puntos venta de marihuana con la aprehensión de 400 plantas que se cultivaban en las proximidades de sendos centros educativos a través de dos operaciones desarrolladas durante una misma semana en Almería capital.
A los arrestados se les atribuye delitos contra la salud pública, defraudación del fluido eléctrico y tenencia ilícita de armas, ya que ambas plantaciones se servían de enganches irregulares para alimentar las cosechas mientras que en la segunda de las operaciones también se encontró una escopeta que figuraba como sustraída.
La primera investigación comenzó a principios del mes de diciembre del pasado año, cuando fueron detectados en las inmediaciones de la calle Hortensia, en el barrio de El Diezmo, numerosos jóvenes en posesión de hachís y marihuana.
Tras varias vigilancias y numerosas incautaciones realizadas a los consumidores, se consiguió ubicar con exactitud el lugar en el que se realizaba la venta de sustancias estupefacientes, situado a "escasos metros" de un colegio y "muy cerca de un instituto". De hecho, algunos de los clientes, una vez comprada la droga, permanecían en las inmediaciones del instituto.
Los investigadores averiguaron que un clan familiar se estaría dedicando a la venta de estupefacientes en su domicilio y que en otra vivienda cercana tenían instalado una plantación de marihuana que contaba con un sofisticado sistema eléctrico y de regadío, enganchada ilegalmente a la red eléctrica.
Así, el pasado 11 de enero se procedió a la entrada y registro de los dos inmuebles incautando en la vivienda familiar cuatro tarros de cristal con cogollos de marihuana. Cada envase contenía distintos tipos de marihuana en relación con el sabor, variando en la acidez o dulzor de la sustancia, o consiguiendo distintas concentraciones de principio activo de THC. También fueron intervenidos 67 gramos de hachís, más de 1.000 euros en monedas y billetes pequeños, un bastón estoque y un machete.
En el registro del segundo inmueble se procedió al desmantelamiento de una plantación de cannabis sativa siendo incautadas 110 plantas de marihuana que arrojaron un peso de 40 kilogramos, numerosos trasformadores, lámparas halógenas, sistemas de ventilación y todos los utensilios necesarios para conseguir en un corto espacio de tiempo un cultivo.
En esta primera operación fueron detenidas cuatro personas --dos hombres y dos mujeres-- con edades comprendidas entre los 28 y 55 años, como presuntos autores de delitos contra la salud pública y defraudación de suministro eléctrico.
ACTUACIÓN EN LOS ALMENDROS
La última operación policial contra el tráfico de drogas se desarrolló durante la tarde del pasado lunes, cuando varios agentes se encontraban realizando labores de prevención de la delincuencia por el barrio de los Almendros. Dos sujetos fueron sorprendidos sacando unas bolsas grandes e introduciéndolas en el maletero de un coche de alta gama.
Los policías comprobaron que los sacos contenían cogollos de marihuana con un peso aproximado de 2.600 gramos y que en el interior de la vivienda había instalada una infraestructura con enganches irregulares al suministro eléctrico, que contaba con todos los elementos necesarios para favorecer el cultivo y procesado de la droga.
Ante estas evidencias, se procedió a la entrada y registro de la casa en la que se intervinieron 290 plantas de marihuana con un peso aproximado de 32 kilos, un machete, un fusil simulado, 36 transformadores, 35 lámparas de 6000 vatios y tres teléfonos móviles. También fueron incautados el vehículo de alta gama empleado para el transporte de las plantas y una escopeta que figuraba como sustraída.
Los dos arrestados han sido puestos a disposición judicial como presuntos autores de delitos contra la salud pública, defraudación de fluido eléctrico y tenencia ilícita de armas.
La operación desarrollada por la Policía cerca de los centros escolares se enmarca dentro del 'Plan director para la convivencia y mejora de la seguridad en los centros de educación y sus entornos', puesto en marcha para ofrecer una respuesta coordinada y global para la prevención e investigación de los delitos de tráfico, elaboración y consumo de sustancias estupefacientes en las proximidades de colegios e institutos.