La Seguridad Social cerró julio con un saldo positivo de 4.774 millones de euros, equivalentes al 0,3 % del PIB, lo que supone un crecimiento del 526 % respecto al superávit de 762 millones del mismo periodo del año anterior, gracias al aumento de los ingresos por cotizaciones sociales.
En los siete primeros meses del año, las cotizaciones sociales ingresaron un 10,2 % más, alcanzando los 88.999 millones de euros (8.238 millones más que un año antes).
El Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones ha destacado en un comunicado que se trata del mayor incremento de los últimos 16 años para este periodo.
Si se descuentan los ingresos correspondientes al mecanismo de equidad intergeneracional (MEI), en vigor desde el pasado 1 de enero, el incremento de las cotizaciones sociales sería del 8,4 % interanual.
En total, los ingresos no financieros del sistema (derechos reconocidos) ascendieron a 123.307 millones, que muestran un incremento del 13,7 % interanual, en tanto que los gastos no financieros (obligaciones reconocidas) llegaron a 118.533 millones, tras crecer un 10,1 %.
Por el lado del gasto la mayor partida es la de las pensiones, que entre enero y julio se incrementó un 10,7 %, hasta los 91.326 millones.
