Rusia lanzó la pasada madrugada un nuevo gran ataque contra Ucrania en el que utilizó 13 misiles, de ellos dos hipersónicos Kinzhal, y 29 drones kamikaze iraníes Shahed dirigidos sobre todo contra regiones del oeste del país, según el parte publicado este miércoles por la Fuerza Aérea ucraniana.

Las defensas aéreas lograron derribar 22 drones, 4 misiles de crucero Kh-101 y 3 misiles de crucero Iskander-M. Los misiles Kinzhal y cuatro de los misiles de crucero no han podido ser interceptados.

Según el informe de la Fuerza Aérea de Ucrania, las defensas aéreas se han activado en los óblasts de Leópolis, Ivano-Frankivsk, Bolín y Ternópil (oeste), Kiev, Zhitómir y Cherníguiv (norte), Poltava y Dnipropetrovsk (centro) y Sumi (noreste).

Al menos siete personas han muerto y cerca de cincuenta han sufrido lesiones en la ciudad de Leópolis durante el ataque, que también ha provocado heridos en la ciudad de Krivi Rig, en la región de Dnipropetrovsk.

Rusia ha lanzado en los últimos días varios ataques masivos que han provocado graves daños en el sistema energético y en otros tipos de infraestructura y han causado múltiples muertes en diversas regiones ucranianas.