Anabel Flores es comunicadora y artista con una dilatada carrera en la ciudad. El pasado 29 de noviembre inaugurada su exposición ‘Asiana’ en la galería Luis Gonzalo, una muestra que podrá visitarse hasta el 19 de diciembre y reúne una serie de retratos femeninos intimistas y preciosistas, inspirados en la tradición oriental. Hablamos con ella y esto es lo que nos contó:
Hace unos días se ha inaugurado 'Asiana', ¿Cómo fue la presentación?
La presentación fue un día de reencuentros con muchos amigos y amigas que quisieron arroparme. Persona del mundo de la cultura y diversos ámbitos de la ciudad que fueron partícipes de una tarde llena de vida y de arte, pues es lo que se transmitía desde la galería Luis Gonzalo a la que hay que agradecer todo lo que está aportando a la cultura en la ciudad. El Centro Cultural, Artístico y Científico Luis Gonzalo es un referente en estos momentos en Cádiz. Un trabajo que Belén González está realizando con mucho esmero y dedicación y amor al arte, pues es ante todo artista, que vela por el legado de su padre, Luis Gonzalo, y apuesta por nuevos valores y artistas ya consolidados a la par, ofreciendo un espacio de exposición, creación, investigación y educativo para todas las edades, haciendo especial hincapié en los menores, con talleres diversos y clases de diferentes disciplinas artísticas.
Quiero agradecer desde aquí a todas las personas asistentes, del mundo de la cultura, artistas, escritores, periodistas, del mundo empresarial, político, de la Universidad, la Uned, etc. Y sobre todo a mi familia que siempre está conmigo en todas las cosas. Eso si es un regalo.
¿Quién era para usted Luis Gonzalo?
Luis Gonzalo, además del pintor del color, de ser una persona inquieta y vitalista, era un gran amigo. Jerezano de nacimiento y gaditano de adopción, siempre llevó a Cádiz por bandera destacando el gran potencial de nuestra provincia. Académico en la Real Academia Hispano Americana de Ciencias, Artes y Letras, su discurso basado en su propia experiencia investigadora y pictórica traspasó nuestras fronteras.
Fue profesor de la Escuela de Ingeniería de la UCA y director de la Escuela de Arte de Cádiz, donde lo conocía cuando cursé formación artística. Nuestro vínculo y amor al arte nos llevó a hacer diversos programas de televisión y entrevistas y su generosidad al compartir sus conocimientos siempre me sorprendió. Sacaba tiempo para todos y su pasión por lo que hacía y por todo aquello que investigaba y descubría lo quería compartir con los demás.
Recuerdo el último programa que hicimos, una entrevista en el Centro Reina Sofía, en el que además visitamos su estudio. Nos pasamos horas viendo su trabajo de tantos años, recordando momentos y repasando su larga e intensa trayectoria. Pero sobre todo me quedo con la emoción que ponía en cada explicación y en cada cosa que hacía. Eso traspasaba a la persona. Por eso para mi ha sido tan importante exponer en este centro que lleva su nombre. Esta colección, Asiana, no podía estrenarse en otro lugar.
¿De dónde viene ese título?
Asiana evoca una mezcla de encanto exótico y misterio lleno de musicalidad y rareza, y hasta se puede convertir en un nombre sugerente. Es un término que probablemente tiene raíces en varias culturas. Una de las teorías sugiere que puede ser una derivación del nombre Asia que a su vez proviene del término griego Aσία y que se utilizaba para referirse a la región oriental, conocida hoy como Asia. Por eso quise este nombre. Además es una unión de Asia y Ana, y es que cuando dibujo a mis “Asianas” me meto en su piel, en sus historias, me mimetizo con ellas. Un término lleno de misterio, como las miradas de todas ellas. Mujeres, que de frente, no te
apartan sus ojos, te siguen hasta formar parte de ti o intimidarte, quien sabe. Hasta quedarse siempre contigo.
Elige figuras femeninas, ¿por qué?
Como digo en un poema que resume la obra: “Asiana son todas las mujeres juntas” y es por eso que esta muestra simboliza el conjunto de la feminidad y el espíritu multicultural y global de nuestro tiempo. Aunque aquí son mujeres asiáticas, es la primera de una colección de obras dedicadas a la mujer, sus múltiples rostros y formas de ser y vivir en diversas partes del mundo.
La mujer es la vida, y cada mujer tiene una historia digna de ser contada y tiene una belleza particular. Ojalá pudiera retratar a todas las mujeres del mundo en todas sus perspectivas de la vida. Con esta muestra hago un homenaje a las mujeres y a sus historias. Como digo, son figuras asiáticas, pero podrían ser de muchos lugares del mundo.
¿De dónde le viene esa mirada al mundo asático?
Me fascina el concepto de belleza de la mujer asiática y su historia. El arte y su cultura.
En esta muestra exploro los tres principales países de Asia oriental: China, Japón y Corea del Sur. Están mezcladas y cada una tiene su nombre y su historia. No queriendo entrar en cuestiones políticas o de cómo viven muchas mujeres en estos lugares, porque la situación de la mujer en Asia es tan compleja como las diferencias políticas y económicas de los países que integran este vasto continente. Si extraigo belleza, sus vestimentas, la luz en sus rostros, pues muchas de ellas desprenden nostalgia, pensamientos, reflexión. En esta colección hago alusión a la mujer en los años 20, a la contemporánea, al aspecto bucólico de algunas de ellas, y a la forma de vestir típica de cada región. Todo está mezclado para que sea un todo.
¿Cuál es su técnica pictórica?
La técnica utilizada en esta colección es únicamente dibujo. Un dibujo minucioso y profundamente estudiado, con mucho ensayo y error. Utilizando lápices específicos, rotulador, pan de oro, con una técnica tonal, blanqueado, pastel, entre otras, hasta conseguir el resultado deseado. Un dibujo realista, en algunas ocasiones mas que en otras, pero que deja ver el dibujo. Lo que más me gusta es pararme en la mirada. Ésta es la clave de todas ellas. Todas te miran y no te apartan los ojos aunque te muevas. Es mi forma de darles vida y que siempre te acompañen. A veces, hasta intimidan.
¿En qué se inspira?
En las historias no contadas de las mujeres, las que están detrás de un rostro que aparentemente es bello siempre, pero que puede esconder de todo; desde miserias, hasta maltrato, hasta opulencias, pasando por toda la felicidad del mundo y todo lo contrario. Las vidas no contadas y la belleza femenina ¿Qué hay detrás de cada una de nosotras?
Me inspira la mujer en todo su estado.
¿Qué es para usted la belleza?
La belleza es lo que no vemos y percibimos a través de la mirada y la luz que desprenden las personas. La belleza es el mundo que estamos destruyendo poco a poco y no nos damos cuenta y es la solidaridad y el amor. Y lo digo desde el corazón porque esa es la belleza en estado puro. La bondad, la transparencia y la inocencia. Todas esas cosas son belleza.
¿Y la belleza femenina?
La mujer es la madre de todas las cosas. Incluso la mujer que no ha parido es madre de alguna manera porque está en “ser mujer”, ser protectora y cuidadora. Es la gran centinela de la vida.
La belleza femenina no tiene edad ni forma. Como he dicho antes, la belleza se transmite en los gestos, en la forma de entender el mundo, en los valores. En la mirada. Y luego, la belleza exterior es mejor si cabe. Estas mujeres que pinto son hermosas, si, pero porque me fascina la elegancia, la forma de vestir, los gestos, la piel y los rostros limpios de estas mujeres. Pero si no hay nada dentro, esta luz no saldría nunca al exterior.
¿Cuál es el origen de su arte? ¿Qué es pintar?
No sabría explicarlo. Dibujo y pinto desde siempre, desde que tengo uso de razón. No se vivir sin la pintura. Es la forma que más me gusta para expresarme. Esta respuesta que es la más corta, es la más simple y lo resume todo: pintar es parte de mi vida y no está completa sin esta expresión.
Es una gran comunicadora, ¿hay relación entre su arte y su profesión?
Claro que hay relación, toda la relación, sobre todo con el programa de cultura pues es la manera de empatizar con otros artistas de cualquier índole. Conocer a otras personas que hacen arte o desempeñan actividades culturales es lo más fascinante de mi trabajo. Me alimento de cada programa, de cada protagonista.
Proyectos futuros
Mi meta es mostrar lo que hago para que las personas disfruten de este trabajo, sencillamente. Que se relajen con el arte, que miren a estas mujeres a los ojos y se imaginen historias, que se olviden por unos instantes de sus problemas y se deleiten con otras miradas. Hablo expresamente de esta colección, pero es extrapolable a otras colecciones y obras.
Hasta ahora lo que he hecho lo he tenido guardado pero no tiene sentido tener las cosas en el “cajón” tanto tiempo. No hay una meta precisa. Donde me lleven mis cuadros, allí iré.