Continúan los movimientos en la plantilla del Cádiz. Tras la llegada de Iker Recio para reforzar la zona de centrales, es turno para las salidas.
Y el primer futbolista en cambiar de aires ha sido Iván Alejo, que deja atrás seis temporadas defendiendo el escudo del Cádiz CF. A punto de cumplir 30 años y con 163 partidos como cadista, el extremo pone rumbo al Apoel de Nicosia de la liga de Chipre.
Aunque se anuncie como una cesión, se trata de un traspaso que tendrá que producirse de forma obligada cuando finalice la temporada.
En su despedida, asegura el vallisoletano que “en el fútbol, como en la vida, todo tiene un principio y un final”. “Hoy ha llegado ese momento tan difícil, son muchos días los que llevo intentando escribir esta carta, muchos días escribiendo y borrando constantemente con tal de tratar de explicaros con sinceridad (como siempre he sido, por muchos problemas que me haya traído) todo lo que han supuesto para mí estos 5 años y medio”, explica el jugador, que llegó a Cádiz “con 24 años, siendo un crío, con la inmadurez por bandera y como seña de identidad, algo de lo que no me sentía orgulloso”. 7
Tras estas temporadas se marcha “siendo un hombre, mucho más maduro y siendo mucho mejor futbolista y persona”. Y por ello da las gracias a Cádiz y al Cádiz “por todo lo que me has aportado”.
“Me habré equivocado en numerosas ocasiones, así que por ello, a todos los que hice daño en algún momento con mis actos o mis palabras, os pido PERDÓN”, asegura Alejo, que es marcha pese a la reciente renovación del pasado verano.
La idea del club es contar con menos efectivos en el primer equipo, pero reforzar posiciones clave que no estaban rindiendo como se esperaba. Por ello, otros candidatos a abandonar la nave cadista son jugadores como Glauder o Escalante, sin descartar a Kouamé, que ya en verano forzó la situación en busca de una salida que no consiguió.
